Prevención de caídas en residencias de ancianos

24 enero 2023

AUTORES

  1. Ramiro Arbex Solanas. Fisioterapeuta en Residencia Pública.
  2. María Serrano Lavilla. Fisioterapeuta Educativa en la Diputación General de Aragón.
  3. Alba Yus Val. Fisioterapeuta en Hospital de Alcañiz.
  4. Izaskun Zarraluqui Anciso. Fisioterapeuta Educativa en la Diputación General de Aragón.
  5. Jorge Ederra Mampel. Fisioterapeuta.

 

RESUMEN

Las caídas son la segunda causa de mortalidad en el mundo. Afectan especialmente a la población mayor de 60 años, siendo uno de los síndromes geriátricos más importantes. Además, existe un elevado riesgo de que se puedan producir secuelas que afecten a su funcionalidad. Tener en cuenta los factores de riesgo asociados a su edad nos permite comprender mejor la situación y anticiparnos a los acontecimientos. Desarrollar medidas que incluyan mejoras en el mobiliario y una valoración individualizada de los usuarios, son muy importantes para establecer planes preventivos. Implementar un programa de ejercicio activo se considera un requisito indispensable para evitar que se produzcan caídas en ancianos institucionalizados. Los programas deben incluir entrenamiento de fuerza y potencia muscular, resistencia aeróbica, equilibrio y flexibilidad.

 

PALABRAS CLAVE

Caídas, residencia, prevención.

 

ABSTRACT

Falls are the second leading cause of mortality in the world. They especially affect the population over 60 years of age, being one of the most important geriatric syndromes. In addition, there is a high risk of sequels affecting their functionality. Taking into account the risk factors associated with their age allows us to better understand the situation and anticipate events. Developing measures that include improvements in furniture and an individualized assessment of the users are very important to establish preventive plans. Implementing an active exercise program is considered a prerequisite to prevent falls in institutionalized elderly. Programs should include strength and muscle power training, aerobic endurance, balance and flexibility.

 

KEY WORDS

Falls, nursing home, prevention.

 

DESARROLLO DEL TEMA

La OMS define las caídas cómo «acontecimientos involuntarios que hacen perder el equilibrio y dar con el cuerpo en tierra u otra superficie firme que lo detenga, pudiendo producir la muerte». Son consideradas un problema de salud a nivel global que causa la muerte de 684.000 personas al año, siendo la segunda causa de mortalidad por traumatismos involuntarios en el mundo, por detrás de los accidentes de tráfico.

Se consideran uno de los factores más fiables para valorar la fragilidad en los ancianos. Se estima que un 30% de las personas mayores de 65 años sufren una caída al año, aumentando al 50% en las mayores de 80 años. A nivel funcional, más de un 70% de las caídas tienen consecuencias clínicas y más de la mitad presentan secuelas posteriormente. El 50% de las personas que sufren una fractura por una caída no recuperan el nivel funcional previo1.

Todo ello contribuye a una pérdida de la autonomía y la independencia, interfiriendo en el principio de envejecimiento activo definido por la OMS como «el proceso de optimización de oportunidades de salud, participación y seguridad con el objetivo de mejorar la calidad de vida a medida que las personas envejecen».

Actualmente se está produciendo un envejecimiento progresivo de la población, lo que se traduce en un mayor número de caídas que a su vez repercuten a nivel sanitario y socioeconómico en la sociedad. Esta situación genera la necesidad de establecer medidas en todos los ámbitos para poder evitar este tipo de fenómenos, reduciendo el gasto económico y mejorando la salud mental de las personas.

Las residencias de la tercera edad cobran especial relevancia en este tipo de planteamientos debido a sus características, por lo que es necesario que los diferentes profesionales pongan en práctica todas las estrategias preventivas posibles y se mantengan actualizados con respecto a las mismas para poder ofrecer los mejores cuidados sanitarios basados en las últimas evidencias disponibles. También se debe incrementar el número de estudios en este ámbito para idear nuevas estrategias útiles2, 3.

 

Factores de riesgo:

Todos aquellos aspectos que contribuyen a aumentar la probabilidad de caídas en el anciano se denominan factores de riesgo y se dividen en:

  • Intrínsecos. Son todos aquellos factores que dependen directamente del estado de salud del anciano. Entre ellos destacan: enfermedades neurológicas, psiquiátricas, del aparato locomotor, cardiovasculares, alteraciones sensoriales, gran debilidad, anemia e hipoxia.
  • Extrínsecos. Son todos aquellos factores que no dependen directamente del estado de salud del anciano. Los más importantes son: irregularidades del terreno, calzado inadecuado, barreras arquitectónicas, iluminación, medicación y elementos del entorno.

 

En rasgos generales, se define al anciano frágil como una persona de edad avanzada, con deterioro cognitivo, debilidad muscular, alteración del equilibrio y la marcha, discapacidad funcional y polifarmacia.

 

Objetivos:

Los objetivos principales a tener en cuenta en la prevención de caídas son:

  • Identificar a los individuos con alto riesgo de caída.
  • Reducir el número de caídas en base a estrategias de prevención.
  • Proporcionar herramientas útiles de valoración.
  • Estandarizar el registro de caídas.
  • Sensibilizar tanto a residentes como a trabajadores sobre la importancia de la detección precoz y de los planes preventivos.

 

Medidas de prevención:

Para evitar que se produzcan caídas es necesaria una valoración personal y exhaustiva de cada usuario. Clasificaremos las medidas en dos grupos atendiendo a las infraestructuras y al tipo de usuario.

  • Infraestructuras:
  • Suelos. No irregulares ni deslizantes, evitar suelos húmedos y encerados, no colocar alfombras, cables u otros obstáculos.
  • Muebles. Distribución adecuada para no entorpecer el paso, evitar bordes y cantos en lugares críticos.
  • Camas no muy altas ni muy estrechas con barandillas y trapecios si es necesario.
  • Sillas con reposabrazos que no sean excesivamente bajas.
  • Mesas con bordes romos.
  • Inodoros altos o con elevadores.
  • Ducha abierta con suelo antideslizante y taburete o silla si es necesario.
  • Asideros junto a baño e inodoro.
  • Lavabo cómodo adaptado a sillas de ruedas con espejo orientable.
  • Puertas no giratorias y sin sistemas de cierre automático.
  • Ventanas de fácil apertura.
  • Ascensores con puertas seguras y parada a ras de suelo.
  • Escalones con banda antideslizante y barandillas a ambos lados.
  • Pasillos con barandillas a ambos lados, habitaciones bien señalizadas.
  • Distribución apropiada del espacio para evitar aglomeraciones y optimización del mismo.
  • Evitar el exceso o defecto de iluminación, colocar luz de noche con interruptores luminosos en las habitaciones.
  • Evitar gravilla y alteraciones del terreno en terrazas y jardines.
  • Llevar ropa cómoda y calzado cómodo pero seguro.
  • Revisión periódica de sillas de ruedas y andadores.
  • Mantenimiento de tapones antideslizantes en bastones.
  • Tipo de usuario:
  • Riesgo normal-bajo. Usuarios que caminan con destreza, estabilidad y soltura y usuarios en silla de ruedas con buena postura, estables, tronco erguido y sin movilidad excesiva ni controlada. Recomendar ejercicio regular en grupos adaptados.
  • Riesgo elevado. Usuarios encamados sin movilidad o con movilidad, usuarios con marcha inestable y difíciles de manipular. Realizar transferencias para prevenir úlceras por presión, subir barandillas, realizar valoración de la marcha, ayudas técnicas, marcha vigilada, levantar con grúa y dos personas.
  • Riesgo muy alto. Usuarios obcecados en caminar con marcha muy inestable, usuarios en silla de ruedas con extremo descontrol, usuarios con alteración sensorial y agitación y usuarios encamados con exceso de movilidad. Valorar el uso de sujeciones, tratamiento farmacológico, cama baja y levantar con grúa y dos personas4.

 

Programa de ejercicios:

Actualmente la fisioterapia se centra sobre todo en el ejercicio activo por parte del paciente y no sólo en tratamientos pasivos en los que no intervenía el paciente. La realización de ejercicios en la prevención de caídas es una buena garantía de ello, ya que existe evidencia de que su realización influye directamente en la disminución del número de casos.

– Entrenamiento de la fuerza y la potencia muscular. Se debe realizar 2-3 veces por semana, ir aumentando progresivamente la intensidad del ejercicio, utilizar todo el rango de movimiento y mantener una correcta técnica de respiración. Los ejercicios deben estar orientados a aquellos grupos musculares indispensables para la realización de actividades de la vida diaria, poder llevar a cabo una marcha funcional y trabajar el equilibrio.

– Entrenamiento de la resistencia aeróbica. Se debe realizar de forma progresiva en función de la capacidad física del usuario. Incluye ejercicios en diferentes direcciones y ritmos, subir y bajar escaleras o planos inclinados y la utilización de bicicleta o cinta rodante. Se debe realizar una monitorización de los síntomas para evitar problemas derivados de la intolerancia al ejercicio.

– Entrenamiento del equilibrio y la marcha. Se pueden realizar diariamente 2 ó 3 veces. Es importante combinarlo con entrenamientos de fuerza y resistencia, ya que se han observado mejoras en la capacidad funcional. Trabajar la propiocepción, tareas complejas y sobre diferentes superficies.

– Entrenamiento de la flexibilidad. Debe realizarse 2-3 veces por semana. Comenzar con 10-15 minutos y aumentar progresivamente. Respetar la regla de no dolor, mantener la posición entre 10 y 30 segundos y realizar los movimientos lentamente y con fluidez5,6.

 

CONCLUSIÓN

Una buena valoración y una utilización adecuada y optimizada de los planes de prevención son herramientas esenciales para evitar las caídas en residencias de la tercera edad. La atención individualizada de cada usuario y una correcta distribución del mobiliario contribuyen a disminuir en mayor medida los factores de riesgo que pueden propiciar las caídas. El ejercicio activo dividido en cuatro tipos de entrenamiento (fuerza y potencia muscular, resistencia aeróbica, equilibrio y flexibilidad) cobra especial importancia en este tipo de planteamientos, constituyendo la base de un envejecimiento activo.

 

BIBLIOGRAFÍA

  1. Organización Mundial de la Salud [sede web]. Caídas. Datos y cifras. 26 de abril de 2021 [fecha de acceso 17 de enero de 2023]. Disponible en: https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/falls
  2. Martínez Pizarro Sandra. Actualización sobre la prevención de caídas en ancianos. Gerokomos [Internet]. 2022 [citado 2023 Ene 18] ; 33( 1 ): 27-31. Disponible en: http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1134-928X2022000100007&lng=es.
  3. Cuesta-Benjumea C, Arredondo-González CP, Lidón-Cerezuela B, Abad-Corpa E. La prevención de las caídas de las personas mayores y sus familiares: una síntesis cualitativa [revista en internet]. 2021 [acceso el 17 de enero de 2023]; 35(2): 186-192. Disponible en: https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0213911119302651
  4. González Ramírez A, Calvo Aguirre JJ, Lekuona Ancizar P, González Oliveras JL, Marcellán Benavente T, Ruiz de Gordoa A et al. El fenómeno de las caídas en residencias e instituciones: revisión del Grupo de Trabajo de Osteoporosis, Caídas y Fracturas de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (GCOF-SEGG) [revista de internet]. 2013 [acceso el 17 de enero de 2023]; 48(1): 30-38. Disponible en: https://www.elsevier.es/es-revista-revista-espanola-geriatria-gerontologia-124-articulo-el-fenomeno-caidas-residencias-e-S0211139X11003192#bibliografía
  5. Documento de consenso sobre prevención de fragilidad y
  6. Caídas en la persona mayor. Estrategia de Promoción de la Salud y Prevención en el SNS. Documento aprobado por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional De Salud el 11 de junio de 2014.
  7. Casas Herrero A., Izquierdo M. Ejercicio físico como intervención eficaz en el anciano frágil. Anales Sis
  8. San Navarra [revista en Internet]. 2012 Abr [acceso 17 de enero de 2023] ; 35(1): 69-85. Disponible en:
  9. http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1137-66272012000100007&lng=es.

 

Publique con nosotros

Indexación de la revista

ID:3540

Últimos artículos