Revisión sistemática acerca de “el papel de la episiotomía en el parto”.

25 enero 2023

AUTORES

  1. Alba Yus Val. Fisioterapeuta en Hospital de Alcañiz.
  2. Jorge Ederra Mampel. Fisioterapeuta.
  3. María Serrano Lavilla. Fisioterapeuta Educativa en la Diputación General de Aragón.
  4. Ramiro Arbex Solanas. Fisioterapeuta en Residencia Pública.
  5. Laura Alejos Telmo. Fisioterapeuta del Servicio Aragonés de Salud.
  6. Izaskun Zarraluqui Anciso. Fisioterapeuta Educativa en la Diputación General de Aragón.

 

RESUMEN

La episiotomía es una cirugía llevada a cabo al final del periodo expulsivo del parto cuando el periné llega a su límite de capacidad de distensión y la salida de la cabeza del feto puede provocar un desgarro del mismo.

Es una de las cirugías más utilizadas en España, pero también una de las más polémicas.

Objetivos: El objetivo principal de este estudio ha sido encontrar información relevante y actualizada acerca del uso y la efectividad de la episiotomía en la práctica clínica, además de conocer el papel de la fisioterapia en este ámbito.

Métodos: Se ha realizado una revisión bibliográfica, utilizando las siguientes bases de datos; PubMed/Medline, La Biblioteca Cochrane, Scopus, Dialnet, PeDro y Elsevier.

Resultados: Tras la revisión realizada en las diferentes bases de datos y sus correspondientes artículos, se han obtenido 4 artículos, de los cuales se han extraído diferentes ideas y conclusiones expuestas a la largo del siguiente estudio.

Conclusión: Se considera que la episiotomía es una técnica válida para evitar complicaciones mayores tras el parto, siempre y cuando no se realice de forma rutinaria, sino en casos personalizados bajo indicaciones.

 

PALABRAS CLAVE

Episiotomía, episiorrafia, parto, desgarro perineal.

 

ABSTRACT

Episiotomy is a surgery performed at the end of the third stage of labor when the perineum reaches its limit of distension capacity and the exit of the fetal head can cause a tear.

It is one of the most commonly used surgeries in Spain, but also one of the most controversial.

Objectives: The main objective of this study was to find relevant and updated information about the use and effectiveness of episiotomy in clinical practice, as well as to know the role of physiotherapy in this field.

Methods: A literature review was carried out using the following databases: PubMed/Medline, The Cochrane Library, Scopus, Dialnet, PeDro and Elsevier.

Results: After the review carried out in the different databases and their corresponding articles, 4 articles were obtained, from which different ideas and conclusions were extracted and presented in the following study.

Conclusion: Episiotomy is considered a valid technique to avoid major complications after childbirth, as long as it is not performed routinely, but in personalized cases under indications.

 

KEY WORDS

Episiotomy, episiorrhaphy, childbirth, perineal tear.

 

INTRODUCCIÓN

La episiotomía es la cirugía que más se realiza en España. En ocasiones, y, cada vez con más frecuencia, al mejorar las condiciones de asistencia al parto, es necesario realizar esta pequeña incisión al final del período expulsivo, denominada también perineotomía, que consiste en realizar una abertura vulvoperineal y evitar así el desgarro del periné1. Ésta comprende la piel, el plano muscular más superficial y parte de la vagina.

FASES DEL PARTO:

Esta incisión quirúrgica tiene lugar durante el parto, el cuál consta de tres etapas4:

  • PRIMERA ETAPA;

Abarca desde el inicio hasta la completa desaparición y dilatación total de 10 cm del cuello del útero.

  • SEGUNDA ETAPA:

Esta etapa se sitúa entre el final de los procesos de dilatación hasta la expulsión completa del niño. En las mujeres nulíparas suelen necesitar unas 20 contracciones en un parto que dura alrededor de 50 minutos mientras que en mujeres multíparas se desencadenan unas 10 contracciones en unos 20 minutos; no obstante, a partir del 5º o 6º parto, vuelven a extenderse en el tiempo, pero acompañados de contracciones menos intensas.

En primer lugar, la disposición del feto varía en un intento de acomodarse en el canal de parto con el fin de que la expulsión de éste se realice de forma correcta. Una de las características más significativas de esta etapa viene dada por la existencia de contracciones del cérvix de forma involuntaria, que se acompañan de contracciones voluntarias (pujos) junto a quejidos que deben aparecer de manera natural. Es importante guiar a la madre para que a la vez que realice las contracciones uterinas intente mantener relajado el periné para una correcta expulsión del lactante, así como hacerle saber que debe empujar cuando la necesidad ya sea irresistible.

La consciencia de la ventilación durante el parto es fundamental; hay que tratar que la mujer no hiperventile, y que, una vez que comiencen los pujos, la inspiración sea controlada con el fin de evitar que el diafragma induzca retrocesos del lactante.

Cuando asoma el cuero cabelludo, la distensión vaginal es tan intensa que se reduce notablemente la vascularización del periné (“anestesia de la naturaleza”). En este momento, y en función de cada caso, se puede realizar una episiotomía.

La cabeza del feto sufre un moldeamiento en su paso a través del canal del parto ayudando a reducir el perímetro global del cráneo. Una vez que la cabeza del bebé ha salido por completo, esta va a rotar hacia una alineación anterior al tiempo que la madre se adapta a los diferentes cambios de presión intrauterinos.

Tras la retirada de sangre, moco y líquido amniótico que se puedan quedar en la cara y nariz del bebé, la cabeza gira hacia su posición inicial. En primer lugar, sale el hombro más superior que provoca fuertes deseos de empuje por parte de la madre; tras la salida del hombro inferior, que apoya sobre el sacro, el resto del cuerpo es expulsado fácilmente.

Con el lactante a la altura de la vagina, el cordón umbilical debe pinzarse y esperar unos 40 s para que se termine de transferir la sangre; excepto en casos de incompatibilidad maternofetal o anestesia general de la madre que deberá cortarse con rapidez.

  • TERCERA ETAPA:

Esta última etapa se caracteriza por la expulsión de la placenta. Aunque se produce en un corto período de tiempo, lleva consigo numerosos riesgos para la madre desencadenando incluso una muerte posparto en caso de hemorragias intensas. Generalmente la placenta se desprende fácilmente con la relajación del útero debido a que esta no es un tejido contráctil; sin embargo, en ocasiones no ocurre así y es necesario favorecer el desprendimiento de forma manual.

Se realizan cuidados a la mujer durante un periodo mínimo de una hora en la que se le tomará el pulso y las constantes, la presión arterial, se observan posibles hemorragias, consistencia y estado del cérvix, etc.

Existen numerosos factores que afectan de forma directa o indirecta en el transcurso del parto natural como la paridad de la madre, el tamaño del feto, la existencia o no de preparación previa, los fármacos utilizados, etc.4.

 

GENERALIDADES DE LA EPISIOTOMÍA:

A pesar de las medidas de prevención y protección del periné, el orificio vulvar puede ser dañado por la cabeza del feto produciendo un desgarro del periné, el cual, dependiendo de la amplitud craneal, puede1:

  • Afecta sólo a la piel.
  • Afecta a la piel y músculos del periné.
  • Lesionar el esfínter externo del ano.
  • Lesionar la mucosa del recto en caso de máxima amplitud.

 

Esta operación se debe realizar cuando el periné llegue a su límite de capacidad de distensión y la salida de la cabeza del feto provoque un desgarro del periné. Se considera que está agotado cuando éste se queda blanco debido a una falta de irrigación, aunque esto sólo indica el momento de la episiotomía, no la necesidad de aplicación absoluta. La incisión debe hacerse antes de que se rompa, ya que si alcanza el esfínter rectal complicaría la situación. No es conveniente esperar hasta la distención excesiva por el peligro de relajamientos pelvianos posteriores, los cuales se han disminuido gracias al uso de la episiotomía, con su consecuente prolapso uterino, cistocele y/o rectocele2.

La episiotomía es un procedimiento obstétrico común pero polémico. Éstas se realizan habitualmente para evitar las laceraciones, traumatismos de la cabeza fetal y la relajación pélvica posparto por distensión de las fascias endopelvianas. A pesar del dolor y edema posterior a esta operación, son más simples de reparar que las laceraciones. Esto depende de la laceración, ya que una episiotomía puede ser mayor que un pequeño desgarro4.

La resistencia de los músculos y la fascia, por la parte posterior, se ve afectada en una episiotomía, así como la fascia endopelviana puede lesionarse incluso aunque la piel y la pared vaginal parecen no presentar lesión. Wilson defiende la episiotomía para evitar la lesión de la pared posterior, el uso de anestesia regional o local antes del procedimiento y que ésta se realice antes de que se dañen los tejidos. Se sostiene que si se realiza sobre un periné distendido y pálido no ofrece protección alguna a la fascia y a la musculatura profunda4.

Es una técnica sencilla, comienza con la infiltración anestésica del periné con 10cc de xilocaína o novocaína al 1 – 2%, siempre sin adrenalina. Con los dedos índice y corazón se levanta el periné para no lesionar al feto, y entre ambos dedos se hace una incisión con tijera, de 5 a 7cm de longitud2.

 

TIPOS DE EPISIOTOMÍA:

Existen diferentes tipos de episiotomía1,2:

  • EPISIOTOMÍA CENTRAL: se realiza el corte verticalmente en medio del periné, la incisión se dirige desde la horquilla posterior de la vulva hacia el ano. Aunque no lesiona estructuras musculares no es recomendable, porque si hay dificultades en la extracción fetal puede prolongarse traumáticamente y dañar el esfínter anal.
  • EPISIOTOMÍA LATERAL: el corte se realiza a 2 – 3cm del rafe; se dirige hacia fuera indiferente hacia la izquierda o derecha comprometiendo las estructuras del labio mayor, pudiendo alcanzar la glándula de Bartolino.
  • EPISIOTOMÍA MEDIOLATERAL: parte del mismo sitio que la episiotomía central y se dirige oblicuamente hacia fuera y hacia abajo. Es la más aconsejable, ya que se puede ampliar si es necesario y no tiene los inconvenientes de las otras.

 

En la mayoría de las primíparas y en aquellas multíparas en las que se sospecha de un feto grande se realiza la episiotomía lateral, aplicando la práctica de la episiotomía central para las multíparas o fetos de menor volumen1.

Tras terminar el parto se realiza la sutura de la episiotomía (episiorrafia o perineorrafia), realizando primero una sutura continua de la vagina, empezando desde el ángulo más profundo de la misma hacia fuera. Después se suturan los planos profundos evitando dejar espacios muertos donde se pueda formar un hematoma o una futura infección. El plano cutáneo se restaura mediante puntos simples o a partir de una unión intradérmica2.

Al terminar la episiorrafia conviene revisar la sutura y practicar un tacto rectal por si algún punto hubiera perforado el recto, ya que provocaría una fístula recto – vaginal2.

 

INDICACIONES DE LA EPISIOTOMÍA:

  • En primíparas o mujeres añosas que tienen una vagina, vulva o periné poco elásticos, con la existencia de cicatrices perineales de episiotomías anteriores o gran edema.
  • Macrosomía fetal.
  • Presentaciones anormales de nalgas, cara y occipital que requieren una gran distensión perineal.
  • En fetos prematuros, para evitar la prolongación de expulsivo y la compresión prolongada de la cabeza fetal.
  • En intervención por vía vaginal (vacuo, fórceps).
  • En partos que interesa que sean lo más rápido posible, como la aparición de sufrimiento fetal al final del expulsivo2.

PREVENCIÓN DE DISFUNCIONES DEL SUELO PÉLVICO:

Existe un conjunto de estrategias de prevención de las disfunciones de suelo pélvico durante el embarazo y el parto (Anexo: tabla 1), éstas se dividen en tres3:

  • PRIMARIAS, encargadas de modificar los factores de riesgo antes del parto.
  • SECUNDARIAS, prácticas obstétricas que reduzcan la lesión del suelo pélvico durante el parto vaginal.

Entre estas se encuentra la episiotomía. Actualmente numerosos estudios han demostrado que su uso no goza de ninguna de las ventajas que se le había atribuido hasta el momento y que sus indicaciones debían ser cuestionadas, limitándose a: macrosomía fetal, inminente desgarro de tercer o cuarto grado y utilización de fórceps.

Además, también se ha demostrado que la realización de esta técnica no protege de un gran desgarro (III o IV) en partos no instrumentalizados, y que la recuperación de la función perineal tras el parto es inferior en mujeres a las que se les ha practicado la episiotomía.

  • TERCIARIAS, encargadas de reconocer las secuelas del parto y promover las medidas oportunas que favorezcan la recuperación.

 

OBJETIVO

El objetivo principal es la investigación de la episiotomía gracias a una revisión bibliográfica de la literatura más actualizada.

En cuanto a los objetivos secundarios, se realiza el estudio de las técnicas de prevención y tratamiento más recientes de la episiotomía y el papel que ejerce el fisioterapeuta en cada una de ellas.

 

MATERIAL Y MÉTODO

 

ESTRATEGIA DE BÚSQUEDA:

Para realizar la selección de artículos de la revisión bibliográfica del trabajo, se han utilizado las bases de datos PubMed/Medline, La Biblioteca Cochrane, Scopus, Dialnet, PEDro y Elsevier, pero debido a la falta de acceso a la información requerida y/o métodos de inclusión y excluidos sólo se han extraído artículos válidos de tres de ellas. Todos los artículos que no fueran en castellano o en inglés fueron excluidos.

La estrategia de búsqueda en cada una de ellas fueron las siguientes:

  • En PubMed/Medline se realizaron dos búsquedas – Episiotomy AND perineal tear – y –Episiotomy perineal.
  • En PEDro se realizó una búsqueda simpleEpisiotomy.
  • En Elsevier se llevó a cabo la búsqueda a partir de Episiotomía.

 

RESULTADOS

Tras la búsqueda realizada en las diferentes bases de datos se han obtenido un total de 12 artículos; 5 de ellos en la base de datos PubMed/Medline, 3 de ellos de la base de datos PEDro y los 4 restantes en la base de datos de Elsevier.

La calidad metodológica de los artículos catalogados como ensayo clínico fue evaluada empleando la escala PEDro y la escala de CASP-España (Critical Appraisal Skills Programme). Ambas se basan en 11 ítems que tienen en cuenta el rigor científico, valorando los siguientes aspectos: criterios de selección, asignación aleatoria, asignación oculta, comparabilidad de base, cegamiento del sujeto, cegamiento del terapeuta, cegamiento del evaluador, seguimiento, análisis de intención de tratamiento, análisis entre grupos y medias de puntuación y variabilidad. Todos, excepto el ítem que evalúa los criterios de selección, se empleó para calcular la puntuación final (máximo 10 puntos). Este ítem se excluyó porque afecta a la validez externa, pero no a la validez interna. La escala PEDro, indica la calidad de los ensayos en función de la siguiente puntuación obtenida: un estudio es de alta calidad si la puntuación es mayor de 5, de calidad moderada cuando la puntuación es 4 o 5, y de baja calidad cuando es menor de 4. Este es el criterio por el cual se ha regido la medición de la calidad en este trabajo5.

Una vez pasada la Guía Caspe los 4 artículos anteriormente seleccionados en la base de datos Elsevier han sido rechazados, ya que ninguno de ellos ha sido válido por no tener una puntuación igual o superior a 5 sobre 10.

Los 3 artículos de la base de datos PEDro sí cumplen una puntuación adecuada para su inclusión. Sin embargo, 4 de los 5 artículos previamente seleccionados en la base de datos PubMed/Medline han sido rechazados al no cumplir los requisitos pertinentes del epígrafe A de la Guía CASPe para ensayos clínicos.

Por todo ello, para la realización del trabajo se cuenta con un total de 4 artículos para llevar a cabo el estudio sobre la episiotomía, todos ellos ensayos clínicos. En anexos, se adjunta la tabla 1, en la que se aplican las preguntas de la Guía Caspe a los artículos finalmente seleccionados.

 

DISCUSIÓN

Una buena episiorrafia es aquella que sigue a una buena episiotomía.

Esta debe de llevarse a cabo con una adecuada hemostasia, y restauración anatómica de los tejidos sin roturas excesivas teniendo especial cuidado a la hora de afrontar los tejidos iguales a ambos lados de la incisión realizada6.

La recuperación de los pacientes después de esta intervención depende de la habilidad quirúrgica, el tipo de material utilizado y de la técnica empleada en la reparación (continua o interrumpida). Considerándose buena técnica de reparación, aquella que requiere de menos tiempo de realización y menos uso de material, además de producir menos dolor tanto a corto como a largo plazo6.

En el artículo de Valenzuela P. (2009) se realiza un ensayo clínico con el objetivo de evaluar una técnica óptima para la reparación de las episiotomías y desgarros perineales con el fin de comparar la técnica de reparación continúa con la técnica de reparación interrumpida.

El estudio conto con la participación de 445 mujeres elegidas al azar que presentaran algunas de las siguientes características: parto vaginal sin instrumentación, al menos 37 semanas de gestación, episiotomía o desgarro que afectara a la piel y el musculo, pero que no produjera lesiones a nivel anal o rectal6.

A su vez, las participantes fueron divididas en dos grupos, un grupo control y otro experimental. Para todas ellas se utilizó el mismo material de sutura (una aguja de sección de punta triangular) y la misma escala análoga de valoración del dolor adoptada por la National Comprehensive Cancer Network para cuantificar el dolor de 0 a 106.

Cabe destacar que, de las reparaciones perineales, el 83% (371 mujeres) fueron a causa de episiotomía y, a su vez, el 96,5% de estas, fueron realizadas en la línea media o derecha mediolateral, mientras que el resto se debió a laceraciones de segundo grado6.

El estudio concluye afirmando que la técnica continua de reparación requiere de menor material de sutura y la recuperación es mucho más rápida, con respecto a la técnica interrumpida. Sin embargo, no existió diferencia en cuanto al dolor post-parto entre ambos grupos6.

 

PREVENCIÓN

Anticiparse ante cualquier posible lesión o complicación posparto es muy importante, por lo que la prevención de posibles disfunciones es esencial. En relación a la episiotomía, existen diferentes técnicas de actuación previas a la decisión de realizar la incisión quirúrgica, como7:

  • Ejercicios de suelo pélvico.
  • Masaje perineal antes y durante el parto.
  • Lubricantes.
  • Inyecciones de hialuronidasa.
  • Bañeras de hidromasaje.
  • Compresas perineales.
  • Flexión de cabeza y moderación.

 

Debido a la ausencia de un tratamiento fisioterapéutico concreto para el periné tras la realización de una episiotomía, y de la controversia que a su vez está suscita, es muy importante tomar las suficientes medidas preventivas al respecto.

En el artículo publicado por Ruckhaberle E (2009), se realiza un ensayo multicéntrico aleatorizado con el objetivo de observar los resultados obtenidos a partir de un entrenamiento vaginal mediante el dispositivo EPI-NO en madres primerizas.

El estudio se realizó con la colaboración de cuatro hospitales universitarios de Munich y Ulm, en los cuales se realizaron exámenes del suelo pélvico en los seis meses anteriores y posteriores al parto. Se incluyeron 276 mujeres nulíparas para el estudio, que, tras no poderse realizar un seguimiento de 4 de ellas, se asignaron 135 al grupo experimental (con EPI-NO) y 137 al grupo control (sin EPI-NO) de forma aleatoria.

El EPI-NO es un dispositivo diseñado para entrenar la dilatación de la vagina con la intención de evitar la episiotomía o posibles desgarros durante la expulsión del feto. Está compuesto de un balón de silicona inflable conectado a una bomba de mano. Además de flexibilizar la vagina, sirve como método de entrenamiento de los músculos del suelo pélvico, así como para el desarrollo de sensaciones similares al parto7.

Las participantes del grupo de estudio fueron instruidas en la técnica con EPI-NO bajo la supervisión del médico en sesiones diarias de 15 minutos a las 38 semanas de gestación. El globo se lavaba con agua y jabón para usarse de nuevo al día siguiente7.

Uno de los objetivos secundarios fue comprobar la incidencia de infecciones vaginales provocadas por la presencia del globo intracavitario y su posible implicación en el recién nacido. No se encontraron diferencias significativas entre ambos grupos.

Los resultados finales del estudio confirmaron un aumento significativo en la tasa de mantenimiento de la integridad perineal y una tendencia hacia una necesidad menor de realizar episiotomías. Asimismo, se observaron acortamientos de la segunda etapa del parto, una notable reducción del estrés durante éste, tanto para el niño como para la madre, y una disminución del uso de analgésicos y anestesia epidural7.

TRATAMIENTO

No existe un tratamiento específico fisioterapéutico posterior a una episiotomía, sino un cuidado muy riguroso gracias a una perfecta higiene de la zona a partir del lavado con agua y jabón.

En la actualidad, se estudia la reducción del dolor perineal tras una episiotomía a partir de técnicas como el TENS a alta frecuencia o láser de baja intensidad, éste último también influye en la curación de tejidos tras una episiotomía.

En el artículo de Santos J. O (2012), se realiza un ensayo clínico con la intención de comparar la terapia con láser de bajo nivel y la simulación del tratamiento ante las puntuaciones del dolor perineal y la cicatrización de la episiotomía en dos grupos equivalentes de mujeres.

En el estudio participaron un total de 52 mujeres anteriormente sometidas a una episiotomía mediolateral, divididas aleatoriamente en dos grupos de 26. El grupo control fue sometido a una simulación del tratamiento, mientras que el experimental fue tratado con TLBI durante tres sesiones. La irradiación se aplicó directamente en tres puntos de la sutura hasta 2, entre 20 y 24 y entre 40 – 48 horas después del parto8.

TLBI es una irradiación a partir de emisión de energía luminosa absorbida y dispersada por todo el tejido, estimulando o inhibiendo actividades enzimáticas y reacciones químicas. Esto da lugar a procesos fisiológicos y terapéuticos que generan acciones analgésicas, antiinflamatorias y tisulares8.

Se ha utilizado para la cuantificación del dolor perineal una escala del 0 al 10, en la que 0 es ausencia de dolor y 10 un indicador de dolor insoportable, pasada antes e inmediatamente después de las tres sesiones. Para la medición del proceso de curación se empleó la escala REEDA (enrojecimiento, edema, equimosis, gestión de la herida y aproximación de los bordes), dotando a cada uno de estos 5 elementos una puntuación de 0 a 3, siendo 3 un indicador traumático8.

El artículo concluyó que esta terapia no aceleró la cicatrización de la episiotomía. Sin embargo, aunque no se pueda concluir que el láser alivia el dolor perineal sí que hubo una reducción estadísticamente significativa de éste entre el grupo experimental en relación al grupo control tratado mediante un simulador. Ambos grupos coincidían en la sencillez del procedimiento y que estarían dispuestas a someterse a él de nuevo8.

En el artículo de Pitangui ACR (2012), se efectuó un ensayo clínico para evaluar la eficacia del TENS en el alivio del dolor del periné tras una episiotomía mediolateral.

El estudio contaba con un total de 40 mujeres primíparas seleccionados al azar en dos grupos, el grupo experimental fue tratado a partir de una estimulación nerviosa eléctrica transcutánea de alta frecuencia (TENS) y al grupo control no se le efectuó tratamiento. El tratamiento con TENS se llevó a cabo con un aparato portátil que generaba un impulso equilibrado de ondas bifásicas a través de cuatro electrodos de silicona de carbono sobre los nervios pudendos y genitofemorales. Esto se llevaba a cabo durante 60 minutos, con una frecuencia de 100Hz e impulsos de 75mu s9.

La intensidad del dolor posterior a la episiotomía se cuantificó gracias a una escala de calificación numérica de 11 puntos (NRS), en las posiciones de reposo y tumbado y durante la deambulación. Se comprobó una notable diferencia entre el grupo experimental y el grupo control, proporcionando que el tratamiento TENS de alta frecuencia reduce significativamente la intensidad del dolor inmediatamente después de su uso y 1 hora más tarde9.

Durante el parto pueden producirse alteraciones y posteriores disfunciones sobre el periné que deberán tratarse para conseguir una calidad de vida idónea para la paciente. A continuación, se expone en la tabla las principales técnicas de tratamiento en las disfunciones del suelo pélvico:

 

TÉCNICAS DE TRATAMIENTO EN LAS DISFUNCIONES DEL SUELO PÉLVICO:

TÉCNICAS MANUALES:

  • Masaje vaginal.
  • Técnicas miofasciales.
  • Masaje transverso profundo o cyriax.
  • Trabajo anual activo para el inicio del fortalecimiento de la musculatura del suelo pélvico.

TÉCNICAS INSTRUMENTALES:

  • Biofeedback.
  • Electroestimulación.
  • Bolas chinas.
  • Diatermia, punción seca, neuroestimulación magnética.

 

EJERCICIOS DE CONTRACCIÓN VOLUNTARIA DEL SUELO PÉLVICO (KEGGEL).

REEDUCACIÓN POSTURAL ANTE ESFUERZOS.

ENTRENAMIENTO ABDOMINOPÉLVICO.

TÉCNICAS COMPORTAMENTALES.

  • Entrenamiento vesical.
  • Ingesta líquida.
  • Control del peso.
  • Control de la alimentación.

 

CONCLUSIONES

En artículo de Valenzuela P. (2009), se observa como la reparación continua presenta una recuperación mucho más rápida y requiere de menor material de sutura, con respecto a la reparación interrumpida. Sin embargo, en cuanto al dolor y las complicaciones de esta técnica, no existen diferencias significativas entre ambas, ya que todas las participantes verbalizan una intensidad del dolor similar mediante la escala análoga presentada a las mismas.

El artículo de Ruckhaberle E (2009) concluyó afirmando que el entrenamiento mediante EPI-NO es fácil de usar y ayuda a prevenir episiotomías innecesarias. Por otro lado, teniendo en cuenta que del masaje perineal también se obtienen muy buenos resultados, podría mejorarse la prevención mediante la combinación de ambas técnicas.

En el artículo de Santos J.O. (2012), se comprueba que no existe diferencia entre ambos grupos en relación a la curación de la herida que provoca la sutura de la episiotomía, pero sí se deduce una mejora en la reducción del dolor perineal aunque no pueda demostrarse que sea eficaz para ello. Todo esto indica la necesidad de ensayos controlados aleatorios utilizando técnicas no farmacológicas y no invasivas como la TLBI para el desarrollo de tratamientos complementarios más eficaces en el alivio del dolor perineal, ya que es un problema muy común tras el parto.

A pesar de las limitaciones existentes en el estudio de Pitangui (2012) debido a la imposibilidad de cegamiento de los pacientes, así como la falta de un grupo placebo o duración del tratamiento, el TENS es un recurso analgésico no farmacológico seguro y viable. Es necesario llevar a cabo futuras investigaciones que corroboren la eficacia de la técnica en el alivio del dolor del periné tras una episiotomía.

Esta técnica conlleva mucha controversia de opiniones, según Niswander “la mayor parte de los partos pueden realizarse sin ella y los beneficios propuestos nunca se han demostrado”. Sin embargo, otros autores defienden que “siempre será mejor que se realice una incisión profiláctica en el lugar más conveniente para una posterior sutura más fácil, ya que, si no, el periné podría desgarrarse por partes más delicadas, como el recto, y los bordes irregulares necesitan una restitución más complicada”3.

Tras la revisión de la literatura se comprueba la existencia de técnicas válidas y seguras para la prevención de la episiotomía en las que se ha de seguir estudiando, ya que evitar una incisión quirúrgica y sus posibles consecuencias es esencial para las pacientes.

La episiotomía es una técnica válida para evitar complicaciones mayores tras el parto, siempre y cuando no se realice de forma rutinaria, sino en casos especiales y personalizados bajo indicación. Por ello, es imprescindible dar a conocer las medidas preventivas a la población para evitar así la cirugía.

 

BIBLIOGRAFÍA

  1. Bonilla-Musoles F., Pellicer A. obstetricia, reproducción y ginecología básicas. Madrid: Ed. Panamericana, (2008).
  2. Capítulo 14: asistencia y dirección médica del parto normal. Vigilancia fetal intraparto y atención al recién nacido. Acién P. Tratado de obstetricia y ginecología obstetricia. Alicante (España): Ed. Molloy. Pags 305 – 306.
  3. Walker C. fisioterapia en obstetricia y uroginecología. Barcelona (España): Ed. Elsevier Masson. 2013. 2º edición.
  4. Stephenson R. G., O`connor L.J. Fisioterapia en obstetricia y ginecología. Madrid (España): Ed. McGraw-Hill Interamericana. 2003. 2º edición.
  5. P. Herrero Gallego, E. García Antón, M.E. Monserrat Cantera, B. Oliván Blázquez, E.M. Gómez Trullén, J. Trenado Molina. Therapeutic effects of hippotherapy in cerebral palsy, a systematic review. Fisioterapia. 2012; 34: 225-34.
  6. Valenzuela P, Saiz Puente MS, Valero JL, Azorín R, Ortega R, Guijarro R. Continuous versus interrupted sutures for repair of episiotomy or second-degree perineal tears: a randomised controlled trial. BJOG. 2009; 116: 436-41.
  7. Ruckhaberle E, Jundt K, Bauerle M, Brisch KH, Ulm K, Dannecker C, Schneider KT Prospective randomised multicentre trial with the birth trainer EPI-NO for the prevention of perineal trauma. Australian & New Zealand Journal of Obstetrics & Gynaecology 2009; 49: 478-483.
  8. Santos JO, de Oliveira SMJV, Nobre MRC, Aranha ACA, Alvarenga MB. A randomised clinical trial of the effect of low-level laser therapy for perineal pain and healing after episiotomy: a pilot study. Midwifery 2012; 2: e653-e659.
  9. Pitangui ACR, de Sousa L, Gomes FA, Ferreira CHJ, Nakano AMS. High-frequency TENS in post-episiotomy pain relief in primiparous puerpere: a randomized, controlled trial. The Journal of Obstetrics and Gynaecology Research 2012; 38: 980-987.
  10. OpenStax College, Stages of Childbirth, 19 Junio, 2013. Ilustración de “Anatomy and physiology”. Imagen tomada de: http://cnx.org/content/col11496/1.6/ (Fecha de actualización: 9 de febrero 2014).

 

ANEXOS

Figura 1: Desarrollo del parto10.

 

TABLA I: ESTRATEGIAS DE PREVENCIÓN DE LAS DISFUNCIONES DE SUELO PÉLVICO DURANTE EL EMBARAZO Y EL PARTO.

ESTRATEGIAS

PRIMARIAS

DE PREVENCIÓN

Cesáreas electivas en mujeres con factores de riesgo inmodificables.
Corrección postural: equilibrio de la estabilidad lumbopélvica durante el embarazo.
Programas de ejercicios de suelo pélvico.
Evitar el estreñimiento y corregir la mecánica defecatoria.
Masaje perineal.
ESTRATEGIAS

SECUNDARIAS

DE PREVENCIÓN

Episiotomía restrictiva frente a la episiotomía protocolaria.
Parto espontaneo frente a parto con fórceps.
Extracción con ventosas frente a extracción con fórceps.
Cuidado del periné durante la fase expulsiva.
Postura del parto.
Pujo fisiológico frente a pujo en Valsalva.
Limitar el tiempo del expulsivo y permitir una fase expulsiva pasiva en mujeres con analgesia epidural.
ESTRATEGIAS TERCIARIAS

DE PREVENCIÓN

Exploración anatómica y funcional de los músculos abdominales y del suelo pélvico.
Cuidados de la episiotomía y/o desgarro.
Valoración articular de la pelvis.
Exploración del coxis.
Reeducación abdominolumbopélvica.

Publique con nosotros

Indexación de la revista

ID:3540

Últimos artículos