Abordaje multidisciplinar de la tortícolis muscular congénita.

5 septiembre 2021

AUTORES

  1. Elsa Mallor López. Fisioterapeuta Hospital General de la Defensa (Zaragoza).
  2. Ana Carmen Valer Pelarda. Fisioterapeuta Hospital Universitario Miguel Servet (Zaragoza).
  3. Laura GIL. Médico de Familia Centro de Salud Valdespartera (Zaragoza).
  4. Celia Carmen Herranz Medina. Terapeuta Ocupacional en Centro de Atención Sociosanitaria de Mayores (Zaragoza). Técnico Superior de Laboratorio de Diagnóstico Clínico.
  5. Mª Teresa Garcés Cardós. Fisioterapeuta Hospital Universitario Miguel Servet (Zaragoza).
  6. Mª Mar Sancho García. Fisioterapeuta Hospital Universitario Miguel Servet (Zaragoza).

 

RESUMEN

La Tortícolis Muscular Congénita (TMC) es una deformación congénita que se identifica por el acortamiento unilateral del músculo esternocleidomastoideo (ECOM) que da lugar a una inclinación homolateral del cuello relacionada con una torsión contralateral. La etiología de la TMC es incierta. La TMC es una afectación prevalente similar a la displasia de la articulación de la cadera. La tasa de incidencia mundial de la TMC varía entre un 0,3% y un 1,9%. El diagnóstico de la TMC se basa en la evaluación clínica completa junto con la palpación de la masa dura alrededor de los dos tercios anteriores del ECOM. Ante la TMC los objetivos generales de la fisioterapia son: solventar las restricciones del movimiento cervical y el desequilibrio muscular, así como, prevenir las alteraciones posturales en el cráneo y el área craneofacial (cara, cabeza y cuello). En los casos más graves, la cirugía es el último recurso, pero en todas las fases la fisioterapia tiene su lugar en el seguimiento.

 

PALABRAS CLAVE

Tortícolis, fisioterapia, tratamiento.

 

ABSTRACT

Congenital Muscular Torticollis (CMT) is a congenital deformity that is identified by unilateral shortening of the sternocleidomastoid muscle that results in an ipsilateral neck tilt related to a contralateral torsion. The etiology of CMT is uncertain. CMT is a prevalent condition similar to dysplasia of the hip joint. The global incidence rate of CMT varies between 0.3% and 1.9%. The diagnosis of CMT is based on the complete clinical evaluation together with palpation of the hardmass around the anterior two-thirds of the sternocleidomastoid muscle. Before the CMT the general objectives of the physiotherapy are: to solve the restrictions of the cervical movement and the muscular imbalance, as well as, to prevent the postural alterations in the skull and the craniofacial area (face, head and neck). In the most severe cases, surgery is the last resort, but in all phases, physiotherapy has its place in the follow-up.

 

KEY WORDS

Torticollis , physical therapy specialty, treatment.

 

DESARROLLO DEL TEMA

La Tortícolis Muscular Congénita (TMC) es una deformación congénita que se identifica por el acortamiento unilateral del músculo esternocleidomastoideo (ECOM) que da lugar a una inclinación homolateral del cuello relacionada con una torsión contralateral1. La tensión en el lado afecto hace rotar la cabeza hacia el lado no afecto e inclinar la cabeza lateralmente dando lugar a la postura asimétrica característica de estos pacientes2. La tortícolis congénita por lo general aparece en el periodo neonatal o después del nacimiento3.

Además de la limitación del rango del movimiento de la inclinación y la rotación, la TMC también puede acompañarse de plagiocefalia, asimetría de las vértebras cervicales y de alteraciones de los rasgos faciales y de la cabeza2.

 

ETIOLOGIA:

La etiología de la TMC es incierta. Por un lado, la teoría tradicional propone que es el desgarro del ECOM al nacer lo que la provoca y, por otro, se encuentran otras sugerencias como: la mala posición intrauterina, la hipótesis isquémica, la teoría del síndrome compartimental intrauterino o perinatal y la hipótesis hereditaria. Por lo que la alteración del músculo ECOM puede deberse a causas prenatales o perinatales4.

Además de las causas nombradas, se evalúan y se registran en los pacientes características clínicas como1:

  • El sexo: si es masculino o femenino.
  • El modo del parto: si se utiliza fórceps, ventosa, etc.
  • La dirección de la tortícolis: si es derecha o izquierda. Es más frecuente a la derecha.
  • El periodo de gestación: la semana de gestación en la que nace el bebé.
  • Presencia de lesiones neurológicas, como puede ser la parálisis cerebral (PC).

 

EPIDEMIOLOGIA:

La TMC es una afectación prevalente similar a la displasia de la articulación de la cadera. La tasa de incidencia mundial de la TMC varía entre un 0,3% y un 1,9%. De este modo, su presentación en 1 de cada 250 recién nacidos hace que sea la tercera alteración congénita más frecuente tras la displasia congénita de cadera y el pie calcáneo valgo3.

La TMC puede ir asociada a otras anomalías como la afectación del plexo braquial, la alteración de las extremidades y el retraso en el desarrollo temprano, la asimetría facial y el trastorno en la articulación temporomandibular1.

Existe un predominio en los varones con una relación 3 a 2 frente a las mujeres, y es más común en el lado derecho.

Así mismo, la TMC también tiene una incidencia del 53% en niños cuya madre era el primer embarazo y existe una alta incidencia en partos traumáticos (fórceps, ventosa)3.

Generalmente, la afectación es unilateral y de extraña manera se presenta de forma bilateral.

 

DIAGNÓSTICO:

La alteración se diagnostica durante el periodo neonatal o la infancia.

El diagnóstico de la TMC se basa en la evaluación clínica completa junto con la palpación de la masa dura alrededor de los dos tercios anteriores del ECOM:

  • El examen físico incluye una evaluación del rango de movimiento de la zona cervical: pasiva, activa y global.
  • La evaluación neurológica y la auditiva son importantes para establecer diagnósticos diferenciales. La valoración visual también es fundamental puesto que estudia si existe debilidad de los músculos oculomotores.

En estos casos es importante observar si los pacientes presentan:

  • Alteración de la morfología craneal por aplanamiento de la región parietooccipital (plagiocefalia).
  • Posiciones compensatorias de las zonas: cervical, torácica, tronco, extremidades, elevación del hombro o lateralización del tronco hacia el lado alterado2,4.

En la mayoría de las ocasiones el diagnóstico se realiza a partir de la clínica, aunque hay casos en los que además se realizan por pruebas complementarias, tales como:

  • Ecografía: es un indicador de la actividad muscular, es una técnica no invasiva para medir el grosor del músculo y es una herramienta fiable.
  • Resonancia Magnética (RM): Se utiliza para la evaluación de la hipertrofia muscular.
  • Escáner de ultrasonido: para determinar la densidad de grosor del músculo ECOM afectado y del contrario y, a su vez, compararlas1.

 

CLÍNICA:

Las manifestaciones clínicas que suelen presentar los pacientes con TMC son:

  • Fibrosis o acortamiento en el músculo ECOM.
  • Movimiento cervical limitado en la lateralización y en la rotación, activa y pasiva.
  • Masa o tumor palpable en el ECOM en los tres primeros meses de vida4.

 

TRATAMIENTO FISIOTERÁPICO:

Ante la TMC los objetivos generales de la fisioterapia son: solventar las restricciones del movimiento cervical y el desequilibrio muscular, así como, prevenir las alteraciones posturales en el cráneo y el área craneofacial (cara, cabeza y cuello).

Para ello, las técnicas más utilizadas son:

  • Tratamiento postural: Se les recomienda a los padres realizar el correcto posicionamiento del niño, colocando el mentón rotado hacia el lado afecto durante las tomas, el sueño, etc. Se debe colocar al niño en decúbito prono cuando están despiertos y bajo la supervisión de un adulto para desarrollar las habilidades motrices en esta posición. Además del tratamiento postural, en estos niños es muy importante que los padres estimulen al niño con objetos o juguetes para que el mismo realice de forma activa el movimiento corregido.
  • Terapia manual5: Se realiza sobre la musculatura del ECOM con objeto de incrementar el estiramiento muscular y el flujo sanguíneo.
  • Ejercicios de estiramiento: Se realizan estiramientos pasivos para aumentar la rotación y la inclinación limitadas.
  • Electroterapia: El tipo de electroterapia más utilizada es el ultrasonido, se aplica con un cabeza del de 1 cm2 una intensidad de 0.5-1.0 W/cm2 durante 3 minutos1.

En general, podemos afirmar que los consejos y la orientación sobre el reposicionamiento (incluido el tiempo boca abajo) y el estiramiento dirigido son intervenciones de bajo riesgo, potencialmente útiles y económicas para que los padres las consideren6.

Cabe destacar que, con el tratamiento correcto, el 90%-95% de los pacientes mejoran antes del primer año de vida y el 97% de los niños mejoran si el tratamiento se empieza antes de los primeros seis años de vida.

La duración del tratamiento fisioterápico en estos casos depende de la fecha de comienzo del tratamiento, puesto que cuanto antes se inicie, más rápido se logra la biomecánica cervical normal, además de conseguir mejores resultados4.

 

TRATAMIENTO MÉDICO:

El tratamiento fisioterápico no es eficaz en todos los casos. En aquellos en los que no se obtiene resolución con él, se usa de forma complementaria la inyección de toxina botulínica en el ECOM y la musculatura de la zona.

La cirugía es la última opción en los casos más graves y la fisioterapia tendrá cabida en su recuperación. La cirugía está indicada en los casos en los que no hay evolución favorable después de seis meses de tratamiento conservador, cuando hay alteraciones de más de 15º en la rotación y en la inclinación pasiva y cuando la banda muscular tensa o el tumor del ECOM no disminuyen. En ellas, la cirugía que se realiza es un alargamiento del ECOM en “z” o una resección completa del mismo4.

 

BIBLIOGRAFÍA

  1. Lee K, Chung E, Lee BH. A comparison of outcomes of asymmetry in infants with congenital muscular torticollis according to age upon starting treatment. J Phys Ther Sci. 2017 Mar; 29(3):543-547.
  2. Lee K, Chung E, Lee BH. A study on asymmetry in infants with congenital muscular torticollis according to head rotation. J Phys Ther Sci. 2017 Jan; 29(1):48-52.
  3. Gundrathi J, Cunha B, Mendez MD. Congenital Torticollis. 2020 Nov 27. In: StatPearls [Internet]. Treasure Island (FL): StatPearls Publishing; 2020 Jan.
  4. Lee SJ, Han JD, Lee HB, Hwang JH, Kim SY, Park MC, Yim SY. Comparison of clinical severity of congenital muscular torticollis based on the method of childbirth. Ann Rehabil Med. 2011 Oct;35(5):641-7.
  5. Keklicek H, Uygur F. A randomized controlled study on the efficiency of soft tissue mobilization in babies with congenital muscular torticollis. J Back Musculoskelet Rehabil. 2018;31(2):315-321.
  6. Ellwood J, Draper-Rodi J, Carnes D. The effectiveness and safety of conservative interventions for positional plagiocephaly and congenital muscular torticollis: a synthesis of systematic reviews and guidance. Chiropr Man Therap. 2020 Jun 11;28(1):31.

 

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