AUTORES
- Ana Isabel Lorda Cobos. Enfermera Especialista en Pediatría. Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza. España.
- Irene Casas Pedraja. Enfermera. Experto Universitario en Técnicas de Enfermería en Atención al paciente Urgente y Crítico. Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza. España.
- Natalia González Díaz. Enfermera. Máster Universitario en Cuidados Intensivos Neonatales y Enfermería Neonatal. Postgrado en Cuidados Neonatales en la Universidad Británica Leeds Beckett.Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza. España.
- Beatriz Calderon Aznar. Enfermera. Centro de Salud la Rochapea. Pamplona. España.
- Laura Espino Alcalá. Enfermera. Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza. España.
- Alessandra Ingrosso Langa. Enfermera. Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza. España.
RESUMEN
La encefalopatía hipóxico-isquémica es una de las causas de daño neurológico más comunes en los recién nacidos a término o casi término. Actualmente el tratamiento de elección para reducir los daños que provoca esta situación es el uso de la hipotermia inducida. Debe iniciarse antes de las 6 horas de vida y la duración total del proceso es de 72 horas. Es importante conocer las características de este tratamiento, así como los cuidados que el personal de enfermería tiene que llevar a cabo antes y durante este, para asegurar la mayor efectividad posible.
PALABRAS CLAVE
Hipoxia encefálica, recién nacido, hipotermia inducida, enfermera.
ABSTRACT
Hypoxic ischemic encephalopathy is one of the most common causes of neurological damage in term or near term newborns. Currently the treatment of choice to reduce the damage caused by this condition is the use of induced hypothermia. It should be started before 6 hours of life and the total duration of the process is 72 hours. It is important to know the characteristics of this treatment, as well as the care that the nursing staff has to carry out before and during this, to ensure the greatest possible effectiveness.
KEY WORDS
Hypoxia, Brain, newborn, hypothermia, induced, nurses.
DESARROLLO DEL TEMA
La encefalopatía hipóxico-isquémica (EHI) es una de las principales causas de daño neurológico del recién nacido a término o casi término. En España entre 500 y 1500 recién nacidos vivos por año en España presentarán una EHI moderada o grave, con las consecuencias que esta conlleva, tanto a nivel neurológico como de morbimortalidad.
Actualmente el tratamiento de elección es la hipotermia inducida, la cual permite reducir la mortalidad y la discapacidad de los recién nacidos con esta patología1,4. Su inicio en las primeras 6 horas de vida tiene un efecto neuroprotector y una duración de 72 horas. Una duración superior no solo no ofrece mayor eficacia neuroprotectora, sino que aumenta el riesgo de efectos adversos.2 El objetivo es disminuir la temperatura corporal central en 3-4ºC3.
Los criterios de inclusión para esta terapia son los siguientes:
- Evento perinatal agudo hipóxico, como bradicardia fetal, prolapso de cordón desprendimiento de placenta, entre otros, con pH < 7 los primeros 60 minutos.
- Déficit de bases ≥ 16 mmol/L los primeros 60 minutos de vida.
- Apgar ≤ 5 a los 10 minutos del nacimiento.
- Estado de conciencia alterado con respuesta ausente o disminuida a estímulos.
- Registro en la electroencefalografía integrada por amplitud con al menos 30 minutos de convulsiones o un trazado de base alterado.
Serán criterios de exclusión:
- Recién nacidos con > 6 horas de vida en el momento de inicio de la hipotermia. En el caso de que tuviera que ser trasladado a otro hospital para su realización podría ampliarse hasta 8-12 horas.
- Peso al nacer < 1800g.
- Edad gestacional < 35 semanas.
- Patologías que requieran una intervención quirúrgica en los primeros tres días de vida.
- Disfunción multiorgánica grave y refractaria al tratamiento.
- Malformaciones congénitas graves4,5.
El proceso de hipotermia inducida consta de tres fases. Previas a estas habrá que mantener al recién nacido en hipotermia pasiva, hasta iniciar el tratamiento:
1.Enfriamiento: hasta alcanzar una temperatura central de 33-34ºC. en unos 30-40 minutos.
2. Mantenimiento: durante 72 horas.
3. Recalentamiento: el descenso de temperatura debe ser de 0,2-0,5ºC/hora. Es el momento más crítico, por la aparición de efectos adversos como convulsiones o alteración electrolíticas. En estos casos está recomendado enlentecer el recalentamiento o suspenderlo una horas4.
El personal de enfermería de las unidades de cuidados intensivos neonatales tiene un papel fundamental en el manejo de esta terapia. En el caso de que el recién nacido tenga que ser trasladado a otro hospital deberá medir la temperatura central cada 15 minutos y aplicar medidas físicas para mantener una hipotermia pasiva (no arropar, apagar temperatura incubadora…).
Antes de iniciar el tratamiento:
El aparato de hipotermia se deberá preparar en cuanto se tenga conocimiento de la posible necesidad de uso.
- Al llegar el recién nacido se pesará y se tomarán las constantes. Se debe asegurar que no hay ninguna fuente de calor enchufada.
- Colocaremos el sensor de temperatura cutáneo y rectal. Este último debe introducirse unos 4-5 cm.
- En el caso de necesitar algún tipo de soporte ventilatorio, debemos asegurarnos de que está conectado el humidificador, pues las secreciones suelen ser más espesas.
- Colocaremos el dispositivo que corresponda para tener una monitorización cerebral mediante un registro electroencefalográfico continuo.
Durante tratamiento:
- Modificar el rango de temperatura del gasómetro antes de meter las muestras de sangre.
- Cuidar especialmente la asepsia, por mayor riesgo de infección por leucopenia.
- Valorar signos que puedan indicar estrés en el recién nacido (hipertensión arterial, frecuencia cardiaca >120 lpm entre otros), que pueden provocar un aumento del consumo de O2, lo cual supone un efecto no deseado.
- Vigilar alteraciones en el EEG.
- Vigilar la aparición de arritmias.
- No realizar método canguro.
- Realizar cambios posturales cada 4 horas.
- Mantener un ambiente tranquilo, con pocos estímulos3,6.
La hipotermia inducida es un tratamiento usado habitualmente en las unidades de cuidados intensivos neonatales. Conocer las características de su manejo, así como los cuidados que hay que aplicar mientras el recién nacido se encuentra en hipotermia, es esencial para poder dar unos cuidados de calidad y que el tratamiento llevado a cabo sea efectivo.
BIBLIOGRAFÍA
- Solaz-García ÁJ, Sáenz-González P, Borrás Vañó MJ, Montejano-Lozoya R. Nursing care in therapeutic hypothermia in neonates with hypoxic-ischaemic encephalopathy. Review of the literature. Enferm Intensiva (Engl Ed). 2021 Apr-Jun;32(2):88-99. English, Spanish. doi: 10.1016/j.enfi.2019.11.001. Epub 2020 Apr 21. PMID: 32327334.
- Garcia-Alix A, Arnaez J, Herranz-Rubia N, Alarcón A, Arca G, Valverde E, Blanco D, Lubián S; Grupo Cerebro Neonatal. Ten years since the introduction of therapeutic hypothermia in neonates with perinatal hypoxic-ischaemic encephalopathy in Spain. Neurología (Engl Ed). 2020 Sep 25:S0213-4853(20)30227-9. English, Spanish. doi: 10.1016/j.nrl.2020.05.017. Epub ahead of print. PMID: 32988661
- Aguado Jiménez AC, Jáuregui Velazquez C, Gómez Duro A, García Calavia P. 3. Abordaje holístico de la atención al lactante con encefalopatía hipóxico-isquémica en España. Ocronos. 2020;3(4):440.
- Gadea Uribarri B, Pinilla Varona L. Cuidados de Enfermería en el tratamiento con hipotermia en la encefalopatía hipóxico-isquémica del recién nacido. Metas Enferm sep 2018; 21(7):67-75.
- ApNovoa P José M, Milad A Marcela, Fabres B Jorge, Fasce C Juan A, Toso M Paulina A, Arriaza O Manuel et al . Consenso sobre manejo integral del neonato con encefalopatía hipóxico isquémica. Rev. chil. pediatr. [Internet]. 2012 Oct [citado 2022 Mayo 31] ; 83( 5 ): 492-501. Disponible en: http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0370-41062012000500012&lng=es. http://dx.doi.org/10.4067/S0370-41062012000500012
- Solaz-Gracía AJ, Gómez R, Ángel MJ, Borrás MJ, Parra MI, Montejano R. Cuidados enfermeros en neonatos con hipotermia terapéutica. Una experiencia de 5 años. Enfermería integral. 2018 . 120: 33-39.