Nº de DOI: 10.34896/RSI.2023.33.43.001
AUTORES
- Kimberly Estefanía Dorantes Bernal. Doctorante en Salud Pública, Residente en la Especialidad de Medicina Familiar, Instituto Mexicano del Seguro Social, Unidad de Medicina Familiar #55, Culiacán Sinaloa, México. Orcid: https://orcid.org/0009-0004-0006-5231
- Luis Alfredo Dorantes Álvarez. Doctorante en Salud Pública, Médico Especialista en Medicina Familiar, Instituto Mexicano del Seguro Social, México. Orcid: https://orcid.org/0009-0003-3421-5843
- Roberto Joel Tirado Reyes. Doctor en Educación, Universidad Autónoma de Sinaloa, Instituto Mexicano del Seguro Social, Unidad de Medicina Familiar #55, Culiacán Sinaloa, México. Orcid: https://orcid.org/0000-0002-1492-7507
- Dulce Samantha Ortiz Fonseca. Médico Especialista en Medicina de Urgencias, Instituto Mexicano del Seguro Social, Unidad de Medicina Familiar #55, Culiacán Sinaloa, México.
- Eréndira Fuentes Chairez. Médico Especialista en Medicina Familiar, Instituto Mexicano del Seguro Social, Unidad de Medicina Familiar #55, Culiacán Sinaloa, México.
- Jesús Gerardo Bernal Galindo. Maestro en Psicología Clínica, Servicios de Salud de Sinaloa, Culiacán Sinaloa, México.
RESUMEN
En el vasto paisaje de la salud femenina, dos figuras imponentes emergen como titanes invisibles, pero inextricablemente unidos: el cáncer de mama y la depresión. El cáncer, una batalla física en las células, con su embate en la integridad física y en el sentido de la feminidad, desencadena una montaña de emociones que, en medio de procedimientos médicos y decisiones cruciales, encuentran una sombra profunda: la depresión. Es por esto, que se indaga este estudio de salud familiar, desentrañando cómo estas dos fuerzas impactan mutuamente la salud y el bienestar de las mujeres, resaltando las oportunidades para el apoyo integral y multidisciplinario que esta intrincada relación exige. Objetivo: Implementar una intervención educativa que se base en la evaluación tanto individual como familiar de una paciente que padece cáncer de mama y depresión. Metodología: Consistió en realizar un estudio de salud familiar en una paciente con Cáncer de mama, abordando la evaluación familiar en cuatro etapas. En la primera etapa se identificó al paciente, seguida por el estudio de la estructura familiar y la revisión del historial médico en la segunda etapa. En la tercera etapa se identificaron los riesgos para la salud familiar y se analizó la dinámica familiar. Por último, en la cuarta etapa del estudio de salud familiar, se aplicaron instrumentos de evaluación familiar y se desarrollaron intervenciones educativas siguiendo los enfoques de Doherty y Baird. Resultados: La intervención educativa, derivada de la evaluación integral de la familia y la implementación de planes de cuidado, generó un incremento significativo en la autoestima y participación familiar con la paciente, lo que tuvo como resultado una mejoría clínica, psicológica y sociocultural.
PALABRAS CLAVE
Cáncer de mama, depresión, Estudio de salud familiar, Niveles de intervención.
ABSTRACT
In the vast landscape of women’s health, two towering figures emerge as invisible but inextricably linked titans: breast cancer and depression. Cancer, a physical battle in cells, with its assault on physical integrity and the sense of femininity, unleashes a mountain of emotions that, in the midst of medical procedures and crucial decisions, find a deep shadow: depression. For this reason, we will delve into this study of family health, unraveling how these two forces impact the health and well-being of women, highlighting the opportunities for comprehensive and multidisciplinary support that this intricate relationship requires. Objective: To implement an educational intervention based on both individual and family evaluation of a patient suffering from breast cancer and depression. Methodology: Consist of carrying out a family health study in a patient with breast cancer, addressing the family evaluation in four stages. In the first stage, the patient was identified, followed by the study of the family structure and the review of the medical history in the second stage. In the third stage, risks to family health were identified and family dynamics were analyzed. Finally, in the fourth stage of the family health study, family assessment instruments will be applied, and educational interventions will be developed following the Doherty and Baird approaches. Results: The educational intervention, derived from the integral evaluation of the family and the implementation of care plans, left a significant increase in self-esteem and family participation with the patient, which resulted in clinical, psychological, and sociocultural improvement.
KEY WORDS
Breast cancer, depression, family health study, levels of intervention.
INTRODUCCIÓN
En el amplio panorama de la salud de la mujer emergen dos grandes figuras en una relación invisible pero inseparable: el cáncer de mama y la depresión. En un mundo que a menudo separa el cuerpo del espíritu, estas dos entidades desafían la dicotomía y convergen en una sinfonía compleja de desafíos médicos y emocionales. El cáncer de mama, una lucha física dentro de la célula, y la depresión, una lucha en lo más profundo del ser, han encontrado una sorprendente y poderosa intersección1.
Biológicamente, el cáncer de mama puede alterar el equilibrio neuroquímico del cerebro, lo que lleva a la depresión. El diagnóstico y el tratamiento a menudo implican un estrés significativo, lo que puede conducir a la liberación de hormonas del estrés como el cortisol, que puede afectar negativamente la salud mental a largo plazo. Además, la alteración hormonal provocada por el cáncer de mama y su tratamiento puede afectar a neurotransmisores clave como la serotonina, que interviene en la regulación del estado de ánimo. Los estudios clínicos han demostrado que las citoquinas inflamatorias, como el factor de necrosis tumoral alfa (TNF-α), están elevadas en pacientes con cáncer de mama y se correlacionan con la gravedad de los síntomas depresivos1.
El cáncer de mama es uno de los diagnósticos más comunes en las mujeres de todo el mundo y afecta no solo al cuerpo, sino al núcleo de la identidad y la feminidad. Los números son reveladores: según la Organización Mundial de la Salud (OMS)2, cada año se diagnostican aproximadamente 2,3 millones de nuevos casos de cáncer de mama. Las emociones oscilan entre la incertidumbre y el miedo durante los tratamientos invasivos y la toma de decisiones críticas. Un diagnóstico de cáncer y su impacto en la integridad física y la feminidad desencadenan una montaña rusa de emociones. En medio de procedimientos médicos y decisiones críticas, acecha una sombra profunda: la depresión. A menudo pasado por alto, este estado emocional abrumador puede enredarse en el proceso de tratamiento y recuperación como un adversario silencioso y persistente.
En la realidad clínica, esta asociación se manifiesta en estadísticas alarmantes. Según la Sociedad Estadounidense del Cáncer, las mujeres con cáncer de mama tienen aproximadamente cuatro veces más riesgo de depresión que la población general. Además, los estudios longitudinales sugieren que la depresión puede afectar el pronóstico del cáncer de mama al afectar la adherencia al tratamiento y la calidad de vida en general.2
Los estudios epidemiológicos iluminan el vínculo insospechado entre el cáncer de mama y la depresión. Investigaciones realizadas por la Sociedad Americana del Cáncer indican que las mujeres con cáncer de mama tienen aproximadamente el doble de probabilidad de desarrollar depresión en comparación con la población general. Esta conexión puede atribuirse a una variedad de factores, que van desde las alteraciones hormonales inducidas por el tratamiento hasta los efectos psicológicos de enfrentar una enfermedad potencialmente mortal.3
Desde una perspectiva psicológica, el diagnóstico de cáncer de mama desencadena una serie de desafíos emocionales que pueden predisponer a las mujeres a la depresión, además, el viaje de recuperación del cáncer de mama a menudo está plagado de incertidumbre, lo que puede exacerbar los síntomas depresivos. La posibilidad de recurrencia y la reconfiguración de la vida después del tratamiento pueden generar una ansiedad constante. Estos factores combinados pueden crear una tormenta perfecta para el desarrollo o agravamiento de la depresión. Las teorías psicológicas, como la teoría de la autorregulación emocional, ofrecen un marco para comprender cómo las estrategias de afrontamiento y la resiliencia se entrelazan con la aparición y la gestión de la depresión en este contexto4.
La trama se complica aún más cuando consideramos la dimensión sociocultural. Las expectativas culturales en torno a la imagen corporal y la feminidad pueden intensificar los desafíos emocionales de las mujeres que enfrentan el cáncer de mama. La pérdida de una parte integral de la identidad, como los senos, o las percepciones erróneas sobre la identidad femenina, pueden crear barreras para buscar ayuda psicológica y perpetuar el aislamiento social, lo que contribuye a la carga emocional, generando sentimientos de disminución de la autoestima. La convergencia de estas preocupaciones con los síntomas de la depresión amplifica el impacto negativo en la salud mental5.
Es por esto, que, en esta exploración cautivadora, nos adentraremos en la intersección entre el cáncer de mama y la depresión, desentrañando cómo estas dos fuerzas impactan mutuamente la salud y el bienestar de las mujeres. Desde la perspectiva médica hasta las emociones crudas que afloran en medio de la adversidad, desvelaremos los hilos invisibles que conectan estas experiencias aparentemente dispares. Al hacerlo, no solo se iluminan los desafíos, sino que también se resaltan las oportunidades para el apoyo integral y multidisciplinario que esta intrincada relación exige. La integración de la atención médica, la psicoterapia y el apoyo social puede generar resultados más positivos tanto en términos de salud física como mental. A través de una comprensión profunda del marco teórico y una consideración empática de la realidad clínica, podemos arrojar luz sobre este complejo cruce de desafíos y cultivar un enfoque más compasivo y efectivo para abordar las necesidades de las mujeres en esta encrucijada de salud5.
METODOLOGÍA
Para el cumplimiento del objetivo planteado se realizó un estudio de salud familiar a una paciente adulta con diagnóstico de Cáncer de mama, perspectivas psicológicas y dimensiones socioculturales que la llevaron al alejamiento de su núcleo familiar, aumentando su vulnerabilidad ante la pérdida de autoestima y autoconcepto, exacerbando los datos clínicos y biológicos de la patología como tal. La paciente fue identificada a través de la consulta de medicina familiar de la unidad de Medicina Familiar No. 55, Instituto Mexicano del Seguro Social, en la ciudad de Culiacán Sinaloa, México. La exploración del estado de salud familiar se llevó a cabo a lo largo de cuatro momentos, abarcando un periodo de alrededor de dos meses. En el primer paso, se realizó la identificación del paciente y se organizó la visita, durante la cual se comunicó el propósito del estudio y, después de obtener su consentimiento, se procedió a la firma del formulario de consentimiento informado. Esto permitió la recopilación de su historia familiar. La segunda fase se centró en analizar la estructura familiar, considerando aspectos como la tipología familiar, la etapa del ciclo vital en la que se encontraba, funciones y dinámica familiares6. Además, se revisó su expediente clínico. En la tercera etapa, se identificaron los posibles riesgos para la salud familiar. Finalmente, en la cuarta fase del estudio, se aplicaron instrumentos de evaluación familiar7, incluyendo la escala de Apgar familiar8, Faces III9, la Escala de Reajuste Social de Holmes10 y la Escala de Depresión y Ansiedad de Hamilton11. En el caso de la escala de Apgar familiar, se considera una herramienta valiosa para comprender la situación familiar y su potencial rol en la génesis y resolución de conflictos. En cuanto a la escala Faces III, se destaca como una medida desarrollada para evaluar la cohesión y flexibilidad dentro del núcleo familiar. La Escala de Reajuste Social de Holmes, por su parte, se considera uno de los instrumentos más utilizados para cuantificar el nivel de estrés experimentado por una persona en un período de tiempo determinado. Con relación a la escala de depresión y ansiedad de Hamilton, se reconoce su utilidad en la evaluación de síntomas depresivos en los pacientes5. Con base en los resultados obtenidos de estas evaluaciones, se diseñaron intervenciones educativas, siguiendo los enfoques propuestos por Doherty y Baird, quien menciona que los niveles de intervención son mínimo énfasis, información y consejería, sentimiento y apoyo emocional, evaluación funcional e intervención planificada y terapia familiar12.
Criterios de selección:
La investigación se fundamentó en las disposiciones establecidas en el Reglamento correspondiente a la Ley General de Salud (LGS) en el ámbito de Investigación para la Salud en México13. Específicamente, se basó en el Título Segundo, Capítulo 1, y en los Artículos 13, 14, 16 y 17 de dicho reglamento. En congruencia con el Artículo 13, se garantizó la prioridad de los derechos y el bienestar de los participantes del estudio. Siguiendo la directriz del Artículo 14, se obtuvo una aprobación positiva por parte del Comité de Ética e Investigación de la unidad médica de adscripción de los investigadores, reafirmando así el cumplimiento de los aspectos éticos y de protección en la investigación. Se atendió la salvaguardia de la privacidad de los individuos sometidos a estudio, de acuerdo con lo establecido en el Artículo 16. Asimismo, en conformidad con el Artículo 17, la naturaleza de la investigación fue categorizada como de bajo riesgo. Adicionalmente, en concordancia con las disposiciones de los Artículos 20, 21 y 22, el procedimiento de obtención de consentimiento informado fue llevado a cabo por escrito, respetando los requisitos estipulados por la Ley General de Salud. Este proceso se llevó a cabo de manera voluntaria, sin presiones indebidas, y con una comprensión completa por parte de los participantes respecto a las actividades contempladas en el estudio de investigación. Por último, en consonancia con el Capítulo 2, los Artículos 28 y 29, se obtuvo la debida autorización tanto de las instancias de salud competentes como de las autoridades civiles de la comunidad involucrada en la investigación y familia del sujeto en estudio.
PRESENTACIÓN DEL CASO CLÍNICO
Paciente de sexo femenina de 62 años de edad, trabajadora social, jubilada, casada, residente de Culiacán Sinaloa, portadora de cáncer de Mama derecho, manejada con quimioterapia y mastectomía radical, acude a consulta en su unidad de Medicina Familiar No. 55, IMSS, por presentar insomnio de meses de evolución, tendencia al llanto fácil, además de astenia y adinamia durante el día, sin otro síntoma acompañante. Refiere que actualmente se siente muy triste, pero por otro lado tranquila, ya que cursa con dificultades amorosas con su pareja, puesto que recientemente tomaron la decisión de ya no vivir juntos en el mismo hogar, debido a que la paciente no se sentía con la capacidad de tener un vínculo afectivo a su lado, desencadenado por la ausencia de autoestima y autoconcepto. Refiere la paciente que este problema impacta en su estado de ánimo, presentando trastornos del sueño, diagnóstico probable de fibromialgia y primordialmente depresión sin tratamiento, motivo por el cual acude a consulta médica y por lo que se evalúa para llevar a cabo un seguimiento domiciliario.
Posterior a ello se inicia con el proceso de la vista domiciliaria informando a los familiares que se estaría acudiendo a su vivienda. Una vez establecidas la fecha y la planeación del estudio, se realizó la visita domiciliaria, cuya finalidad fue la de realizar una evaluación del entorno y dinámica familiar a través de entrevistas directas, donde se expresan crisis familiares no superadas, alteración de la dinámica y funcionalidad familiar para evaluar la codependencia emocional que existía antes y después del diagnóstico de Cáncer de mama, evaluar el impacto que ha tenido la salida del esposo de su hogar en su vida cotidiana, con la finalidad de conocer el contexto biopsicosocial de su familia y ofrecer las medidas terapéuticas y profilácticas necesarias para su estabilidad emocional y de su núcleo familiar, y con esto disminuir los factores de riesgo psicosociales presentes en el Cáncer.
De acuerdo a su tipología familiar, en base a su desarrollo es moderna, en base a su demografía urbana, en base su integración es desintegrada, en base a la ocupación del jefe es profesional en trabajo social/jubilada, con base a su conformación familia seminuclear con rasgos de nuclear extensa, de acuerdo a las complicaciones en su desarrollo: familia interrumpida, con base al parentesco es monoparental extendida compuesta, con base a la presencia física en el hogar es extensa ascendente y de núcleo no integrado, con base a su nivel económico es sin pobreza familiar.
De acuerdo con el ciclo vital de Geyman6 en fase de independencia, de acuerdo con el ciclo vital de la OMS2 en fase de contracción, Huerta/ PAC6 en etapa de dispersión fase desprendimiento, Duvall3 se encuentra en etapa VI o Desprendimiento, de acuerdo con Lauro Estrada Inda7 en fase de vejez y según Salvador Minuchin7 en familia con hijos adultos. En la escala del ciclo psicosocial de Erick Erickson6 se encuentra en integridad vs desesperanza y en base al ciclo de pareja según Mariano Barragán6 en enfrentamiento de la vejez, soledad y muerte.
Las funciones familiares básicas se cumplen parcialmente solo por un cónyuge, aunque cada uno tiene su rol familiar, la jerarquía y la centralidad se encuentra totalmente establecida por la paciente, la comunicación siempre ha sido clara y afectiva parcialmente por un cónyuge, las reglas son explícitas y flexibles, impuestas por la paciente, los límites individuales son respetados, los limites intergeneracionales son claros y flexibles, hacia el exterior son difusos, permeables o amalgamados, ya que la paciente responde con excesiva rapidez por su núcleo familiar. Se identifican alianzas entre sus hijos, mientras que con ella presentan coalición.
Las crisis normativas se encuentran parcialmente superadas, exceptuando la dependencia económica del núcleo familiar, continuando con deudas correspondientes a su esposo, así como un apego emocional, y la integración de su hija y esposo en casa de ella.
Las crisis paranormativas se encuentran en su mayoría superadas, salvo las infidelidades por parte de su esposo, su separación más reciente, el temor a una recaída de cáncer de mama en un futuro y los recientes tratamientos otorgados por el servicio de reumatología para tratar el probable diagnóstico de fibromialgia ocasionado por la imposibilidad adecuada al sueño.
La comunicación es afectiva e instrumental bien balanceadas, clara y directa, sin generalizaciones inadecuadas, congruente en cuanto a lo verbal y no verbal y dentro de un marco emocional de apoyo entre los actuales integrantes del hogar.
Cuentan con casa propia, de 2 pisos, que cuenta con sala, cocina, comedor, con todos los servicios básicos, muebles indispensables y otros, la casa cuenta con 3 recamaras, cada una con cama, 1 1/2 Baño, piso de vitropiso, cuentan con todos los electrodomésticos indispensables.
Su estado socioeconómico según el índice de pobreza familiar es de una familia sin evidencia de pobreza.
Presentan hábitos dietéticos familiares de 3-5 veces al día, bueno en calidad y cantidad, con variedad en alimentos de acuerdo con el plato del buen comer y cuentan con buena actividad recreativa.
Al cuestionar sobre las causas de su insomnio y las medidas farmacológicas que recientemente se le indicaron para tratar la falta de sueño, depresión y fibromialgia, comenta que en ocasiones lo omite y no tiene adherencia terapéutica debido a que no recuerda consumirlo cuando se siente sola o sin ganas de seguir en la lucha constante, lo cual agrava la situación del Cáncer y le ocasiona más efectos secundarios del plan terapéutico, como náuseas, vómito, disnea, cambios en el apetito, cambios emocionales, cambios hormonales y trastornos del sueño, lo cual, en un sentido bidireccional prolonga su síntomas depresivos.
En la actualidad la paciente comenzó con las medidas multidisciplinarias que le han dado una mejoría significativa en los efectos secundarios, ha dormido mejor y han disminuido sus síntomas depresivos.
Por tratarse de un estudio de salud familiar, la evaluación se enfocó en análisis del entorno y la dinámica familiar, dado que al momento de la entrevista la paciente de cuidado contaba con un plan terapéutico adecuado para el Cáncer de mama, se estaban descuidando otros factores psicosociales y conductuales de gran relevancia; sin embargo, tras la valoración se pudo constatar que la causa de su depresión y recientemente agregado el diagnóstico aún en estudio de fibromialgia, obedece a factores contextuales y emocionales, lo cual se manifiesta en un mal apego al tratamiento y bidireccionalmente aumentando los efectos que conlleva el Cáncer de mama.
Plan de Manejo Integral:
- Cáncer de mama:
OBJETIVO: Corto plazo. Terminar quimioterapia y plan terapéutico. Mediano plazo: Informar, concientizar acerca de la autoexploración mamaria. Control de mastografía cada año. Largo plazo: Seguimiento y vigilancia del progreso para evitar recaídas.
ACTIVIDADES: Nivel de intervención 1, 2, 3 y 4 de Doherty y Baird12. Proporcionar información continua y orientación de los beneficios mediante la consejería informativa, así como consejería en crisis. Control y orientación por médico familiar, canalización a un grupo de autoayuda. Referir al servicio de Psicología y Trabajo Social.
RESPONSABLES: Paciente, médico familiar, Psicólogo, trabajo Social, grupo de autoayuda. Referencia a segundo nivel: Ginecología.
- Depresión:
OBJETIVO: Corto plazo: Informar sobre este padecimiento, otorgándole herramientas e intervenir oportunamente para poder superar este episodio de depresión por la separación de su esposo. Mediano plazo: Darle seguimiento y no subestimar cualquier signo o síntoma nuevo que muestre. Largo plazo: Comprometerla acudir a sus sesiones cognitivo-conductuales y tomar de manera correcta su farmacoterapia.
ACTIVIDADES: Nivel de intervención 1, 2 y 3 de Doherty y Baird 12. Proporcionar información continua y consejería familiar con apoyo emocional y consejería dirigida a la crisis familiar. Control y orientación por médico familiar, Canalización al servicio de Psicología.
RESPONSABLES: Paciente, médico Familiar, redes de apoyo y psicólogo.
- Fibromialgia:
OBJETIVO: Corto plazo: Apego a tratamiento otorgado por el médico reumatólogo. Mediano plazo: Acudir a sus citas control. Largo plazo: Reducción del dolor y mejora de la calidad de vida.
ACTIVIDADES: Nivel de intervención 1, 2 y 3 de Doherty y Baird 12. Proporcionar información continua y y orientación de los beneficios mediante la consejería informativa. Control y orientación por médico familiar, canalización y referencia al servicio de reumatología.
RESPONSABLES: Paciente, médico familiar y reumatología.
RESULTADOS
En base a los instrumentos de evaluación familiar se obtuvieron los siguientes resultados: Actualmente los miembros que componen la estructura familiar presentan un Apgar familiar8 normal lo que representa una familia funcional, relacionada y caótica según Faces III9. La familia presenta un evento crítico moderado- severo en base a la escala Thomas Holmes10 debido a la reestructuración del matrimonio de su hija retorno a la casa de la paciente. En la clasificación triaxial de la familia se encuentra una disfunción en los subsistemas familiares, respecto a la paciente se encuentra en un momento de depresión acorde a la escala de Hamilton11 la cual ya se encuentra en tratamiento, manifestando mejoría de los síntomas y del aplanamiento emocional.
Al ver los resultados obtenidos se aplicaron las intervenciones de Doherty y Baird12 basadas en la jerarquización de sus problemas, comenzando con mínimo énfasis en donde se estableció una adecuada relación médico- paciente; información y consejería involucrando el apoyo familiar como soporte, proporcionando consejos de salud a la familiar para que se tomaran decisiones adecuadas; sentimiento y apoyo emocional, la cual se otorgó en consejería en crisis una vez comprendido el desarrollo normal del contexto familiar y el modo en el que reaccionan frente a un evento crítico; evaluación funcional e intervención planificada, en el cual a partir de un análisis estructurado de la dinámica familiar se desarrollaron intervenciones planificadas y un seguimiento adecuado, realizando estrategias dirigidas a mejorar la capacidad familiar que la lleven a soluciones alternativas para la resolución de problemas; por último, se refiere a segundo y tercer nivel para apoyo con el servicio de psicología y psiquiatría, empleando herramientas psicoterapéuticas que intentan modificar estructuras de las familias disfuncionales y aumentando la dosis de sus antidepresivos, con lo que se logró el fomento de la autoconciencia y el entendimiento de sus propias fortalezas, valores y debilidades para empoderarse y tomar decisiones alineadas con su verdadero ser, estableció metas personales enfocadas en la superación del cáncer de mama, lo que le brindó un sentido de logro y satisfacción; estableció su autocuidado como prioridad, así como la autorreflexión y la autocompasión ayudándole a superar las autocríticas y promoviendo su aceptación personal, mantiene una dieta adecuada, haciendo ejercicio de leve intensidad y descansando adecuadamente gracias a su plan farmacológico, mejorando su salud física y mental; ingresó a un grupo de ayuda en el cual aprende nuevas habilidades utilizándolas como vía de liberación de emociones; mantiene relaciones sociales saludables y positivas rodeándose de personas que la apoyan y valoran, nutriendo una sensación de pertenencia; finalmente, desarrolla habilidades de manejo emocional, como la inteligencia emocional y la resiliencia lo que le ayuda a enfrentar desafíos y cambios en la vida de manera más positiva, fomentando la aceptación y el amor por el propio cuerpo, independientemente de los estándares de belleza externos6.
DISCUSIÓN
Varios estudios recientes han arrojado luz sobre la compleja interacción entre la depresión y el cáncer de mama, destacando su impacto en áreas como la supervivencia, la calidad de vida y la salud mental en general. Las causas subyacentes incluyen factores genéticos, hormonales y de estilo de vida. El manejo integral de ambas condiciones es crucial para prevenir complicaciones a largo plazo.
Relacionado con lo anterior Castillo y colaboradores14 realizaron una investigación donde concuerdan que el cáncer de mama es la neoplasia maligna más frecuente en mujeres en todo el mundo y su diagnóstico y tratamiento puede estar acompañado de síntomas depresivos asociados a factores genético-ambientales, desequilibrio entre los sistemas nervioso central, endocrino e inmunitario, edad de la paciente; presencia de metástasis, quimioterapia, y rehabilitación física. Su tratamiento está basado en diversos tipos de abordajes, como hipnosis, meditación, musicoterapia y manejo del estrés. Por su parte, Ruíz González15 menciona que el cáncer de mama supone en ocasiones la vivencia de un acontecimiento traumático que incrementa la vulnerabilidad a padecer trastornos mentales como la depresión. Sin embargo y a pesar del sufrimiento, las mujeres se ven más fortalecidas y resilientes tras la superación de la enfermedad. Hernández Silva y colaboradores16 refieren que el cáncer genera un choque emocional que merma la calidad de vida, analizaron la calidad de vida de 102 mujeres mexicanas en las cuales se comprobó la existencia de manifestaciones de ansiedad, depresión y estrés, relaciones negativas con la salud global y la escala de funcionamiento, lo que incrementó la carga sintomática.
La asociación entre el cáncer de mama y la depresión trasciende la suma de sus partes. Revela la profundidad de la interconexión entre el cuerpo y la mente, la biología y la psicología, lo individual y lo colectivo. Esta asociación desafía a los profesionales de la salud a adoptar un enfoque integral, abordando no solo las preocupaciones médicas sino también las emocionales y socioculturales. En este llamado a la acción, se abre una oportunidad para empoderar a las mujeres en su búsqueda de recuperación, no solo como sobrevivientes, sino como guerreras que enfrentan la batalla física y emocional con una determinación feroz.
CONCLUSIONES
En el intricado tapiz de la vida, la asociación entre el cáncer de mama y la depresión nos recuerda que la experiencia humana es rica y profundamente entrelazada, emerge como una poderosa narrativa que entrelaza la fragilidad y la fuerza, la oscuridad y la luz. A medida que las mujeres enfrentan la realidad desafiante y el impacto devastador del diagnóstico de cáncer de mama, sus emociones, pensamientos y bienestar mental también juegan un papel fundamental en este viaje. La lucha contra el cáncer de mama va más allá de las células y los tratamientos; es una sinfonía de fuerza, vulnerabilidad y resiliencia.
Esta batalla va más allá de los quirófanos y las salas de tratamiento; es un viaje personal y compartido que trasciende lo físico. En este viaje, la depresión emerge como una sombra silenciosa, una compañera de la que pocos hablan, pero que acompaña a muchas. La incertidumbre, el miedo y la ansiedad pueden tejerse en los pensamientos, amenazando la serenidad interna y la esperanza.
Esta conexión única nos llama a abrazar una visión más compasiva de la salud, reconociendo que el cuerpo y la mente están inextricablemente unidos. A través del caos de las incertidumbres y las emociones crudas, las mujeres encuentran la valentía para enfrentar su doble batalla: la física y la emocional. La depresión, una compañera silenciosa en esta travesía, nos recuerda que la salud mental es tan valiosa como la salud física.
Como sociedad, esta asociación nos desafía a unir nuestras fuerzas en apoyo de estas mujeres valientes. Al brindar un espacio seguro para expresar emociones, alentar la búsqueda de ayuda profesional y fomentar una comunidad de comprensión y apoyo, podemos aliviar la carga de estas guerreras. Como sociedad, estamos llamados a reconocer y abordar la importancia de la salud mental en el contexto del cáncer de mama. Al desterrar el estigma en torno a la depresión y alentar un diálogo abierto, podemos proporcionar un refugio emocional para las valientes luchadoras. La empatía y el apoyo se convierten en herramientas cruciales, tejiendo una red de amor y esperanza que se extiende más allá de las palabras. Las mujeres que enfrentan el cáncer de mama y la depresión se convierten en ejemplos vivientes de la capacidad humana para enfrentar la adversidad con valentía. Sus historias nos recuerdan que el viaje hacia la curación es tanto un proceso físico como un viaje del alma, que exige una determinación indomable y una red de apoyo comprensivo.
BIBLIOGRAFÍA
- Arbulú-Latorre X. Factores asociados a depresión en pacientes con cáncer de mama. Rev. Facultad de Medicina Humana. [Internet] 2019. [Citado 09 agosto 2023];19(1):1-10. Disponible en: https://inicib.urp.edu.pe/rfmh/vol19/iss1/10/
- Organización Mundial de la Salud. Cáncer de mama. Who.int [Internet]. 2023 [Citado 16 mayo 2023]. Disponible en: https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/breast-cancer
- Marouf MA, Sánchez MA. Relación entre calidad de vida, depresión y ansiedad en mujeres con cáncer de mama desde una perspectiva Enfermera: revisión integrativa. Rev Cubana Enferm. [Internet] 2023. [Citado 22 agosto 2023];38(3). Disponible en: https://revenfermeria.sld.cu/index.php/enf/article/view/5730/920
- Becerra-Gálvez AL, Reynoso-Erazo L, Lugo-González IV. Terapia de Activación Conductual Breve para la Depresión en mujeres con cáncer de mama: casos clínicos. Psicooncologia (Pozuelo De Alarcon). [Internet] 2020. [Citado 21 agosto 2023];17(2):387–400. Disponible en: http://dx.doi.org/10.5209/psic.71363
- Galindo-Vázquez O, Bargalló-Rocha E, Lerma A, Costas-Muñiz R, Acosta-Santos NA, Meneses-García A. Malestar emocional, ansiedad y depresión en pacientes con cáncer de mama identificadas por el equipo de la salud de oncología. Psic y Sal. [Internet] 2022 [Citado 21 agosto 2023];33(1):171–86. Disponible en: http://dx.doi.org/10.25009/pys.v33i1.2782
- Huerta-González JL. Medicina familiar, La familia en el proceso salud- enfermedad. Primera edición. México, D.F., Editorial Alfil, S.A. de C.V. 2005.
- Estrada-Inda L. El ciclo vital de la familia. Primera edición. México, D.F., Editorial de bolsillo. 2012.
- Smilkstein G. The family APGAR: una propuesta para una prueba de función familiar y su uso por los médicos. J Fam Pract. [Internet] 1978. [Citado 10 agosto 2023]; 6(6). Disponible en: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/660126/
- Schmidt V, Barreyro JP, Maglio AL. Escala de evaluación del funcionamiento familiar FACES III: ¿Modelo de dos o tres factores?. Escritos de Psicología. [Internet] 2010. [Citado 10 agosto 2023]; 3(2): 30-36. Disponible en: http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1989-38092010000100004&lng=es
- Holmes TH, Rahe RH. La escala de reajuste social. J Psychosom Res. [Internet] 1967. [Citado 08 agosto 2023]; 11(2):213–8. Disponible en: http://dx.doi.org/10.1016/0022-3999(67)90010-4
- Hamilton M. Una escala de calificación para la depresión. J Neurol Neurocirugía Psiquiatría. [Internet] 1960. [Citado 10 agosto 2023]; 23(1):56–62. Disponible en: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/14399272/
- Salazar de la Cruz M, Jurado-Vega A. Niveles de Intervención Familiar. Acta méd. Peruana. [Internet] 2013. [Citado 09 agosto 2023]; 30(1): 37-41. Disponible en: http://www.scielo.org.pe/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1728-59172013000100007&lng=es
- Secretaría de Salud. Reglamento de la Ley General de Salud en Materia de Investigación para la Salud. Ciudad de México, México: Diario Oficial de la Federación. [Internet] 2014. [Citado 21 agosto 2023]. Disponible en: https://www.researchgate.net/deref/https%3A%2F%2Fwww.diputados.gob.mx%2FLeyesBiblio%2Fregley%2FReg_LGS_MIS.pdf?_tp=eyJjb250ZXh0Ijp7ImZpcnN0UGFnZSI6InB1YmxpY2F0aW9uRGV0YWlsIiwicGFnZSI6InB1YmxpY2F0aW9uRGV0YWlsIiwicHJldmlvdXNQYWdlIjoiX2RpcmVjdCJ9fQ
- Estrella-Castillo D, Pech-Argüelles RC, Olais-Arjona I, Rubio-Zapata H, Leal-Herrera YA. Evidencia científica de la relación entre depresión y cáncer de mama: revisión sistemática. Rev Med Inst Mex Seguro Soc. [Internet] 2020. [Citado 08 agosto 2023];58 Supl 1:S91-96. Disponible en:http://revistamedica.imss.gob.mx/editorial/index.php/revista_medica/article/view/3322/4232
- Ruíz- González P, Zayas A, Morales L, Gil P. Resiliencia como Predictora de depresión en mujeres con cáncer de Mama. Rev Psicología. [Internet] 2019. [Citado 15 mayo 2023]. 4(1): 1-11. Disponible en: https://repositorio.uandina.edu.pe/handle/20.500.12557/2350
- Hernández-Silva MA, Ruíz-Martínez AO, González-Escobar S, González-Celis, Rangel ALM. Ansiedad, Depresión y Estrés asociados a la Calidad de Vida de Mujeres con Cáncer de Mama. Acta Investig Psicol [Internet]. 2020;10(3):102–11. Disponible en: http://dx.doi.org/10.22201/fpsi.20074719e.2020.3.362