Prevalencia de las infecciones de asociadas al uso de catéteres venosos centrales.

12 mayo 2021

AUTORES

  1. Adrián Medrano Hernández. Diplomado en Enfermería. UCI Postoperatorio Cardíaco del Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza.
  2. Andrea Juan Alejandre: Graduada de Enfermería. Bloque Quirúrgico de Traumatología del Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza.
  3. María Isabel Martín Sánchez. Diplomada de Enfermería. Bloque Quirúrgico de Traumatología del Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza.
  4. Carmen Bricio Medrano. Diplomada de Enfermería. Bloque Quirúrgico de Traumatología del Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza.
  5. Rosa María Rodríguez Grande. Diplomada de Enfermería. Bloque Quirúrgico de Traumatología del Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza.
  6. Tamara Sanchís Colas. Graduada en Enfermería. Planta 3 Norte de Cirugías del Hospital General de la Defensa. Zaragoza.

 

RESUMEN

Los accesos venosos constituyen una parte importante en el manejo de los pacientes en unidades de cuidados críticos, utilizados no sólo para la administración de fluidoterapia o medicación intravenosa sino también para transfusiones de hemoderivados, nutrición parenteral o la extracción de sangre. La infección nosocomial de los catéteres constituye un gran problema para la salud, alargando la estancia del paciente en las unidades y provocando grandes secuelas o incluso la muerte para aquellos que la padecen.

 

PALABRAS CLAVE

Infección nosocomial, enfermería, catéter venoso.

 

ABSTRACT

Venous access is an important part of the management of patients in critical care units, used not only for the administration of fluid therapy or intravenous medication but also for transfusions of blood products, parenteral nutrition or blood collection. Hospital infection of the catheters constitutes a major health problem, lengthening the patient’s stay in the units and causing major sequelae or even death for those who suffer from it.

 

KEY WORDS

Hospital Infection, nursing, venous catheter.

 

INTRODUCCIÓN

Hasta la llegada de los antibióticos en el S.XX las infecciones eran la primera causa de muerte en la población. Actualmente se sitúan en segundo lugar, superadas por las enfermedades cardiovasculares1 INE.

La infección nosocomial (IN) es aquella que aparece como consecuencia de la estancia hospitalaria y guarda una estrecha relación con la actuación del personal sanitario. Son aquellas que se presentan transcurridas las primeras 72 horas después del ingreso en el hospital o antes de los 15 días del alta hospitalaria y son más frecuentes en personas mayores y en niños. Las causas de una infección nosocomial suelen ser microorganismos (bacterias, virus, hongos o parásitos) de diferentes tipos, fácilmente contagiosos y en ocasiones con resistencia a los antibióticos habituales.

En España, los datos sobre la IN se encuentran recogidos en el estudio de Prevalencia de Enfermedades Nosocomiales, denominado EPINE y en el estudio Nacional de Vigilancia de la Infección Nosocomial, ENVIN-HELICS. Estos estudios son de carácter anual y comenzaron con la recogida de los datos en la década de los 90. El EPINE hace referencia a los datos recogidos de todas las unidades de hospitalización de los hospitales participantes en el proyecto, mientras que el ENVIN-HELIC obtiene los resultados de las UCI de los hospitales.2-3

 

OBJETIVO

Conocer la prevalencia de las infecciones asociadas al uso de catéteres venosos centrales.

 

METODOLOGÍA

Se realizó una revisión bibliográfica del manejo de los PICC en Cuidados Intensivos. Para ello consultamos las siguientes bases de datos: PubMed, ELSEVIER, Scielo, Medline y Google Académico; usando las siguientes palabras clave: Catéter Venoso Central, PICC, Cuidados intensivos, etc.

 

RESULTADOS–DISCUSIÓN

La mayor parte de pacientes portadores de CVC se encuentran localizados en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), siendo, por lo tanto, la unidad hospitalaria donde más casos se van a dar de bacteriemia asociada a catéteres venosos (BA-CVC).

En las UCI se utilizan varios tipos de dispositivos de acceso vascular: Los catéteres venosos periféricos (CVP), los catéteres venosos centrales (CVC), los catéteres venosos centrales de inserción periférica (PICC) y los catéteres para hemodiálisis (Shaldon).

Para seleccionar el dispositivo de acceso venoso más adecuado para la administración de un tratamiento, se deben tener en cuenta varios criterios como la duración del tratamiento, las características del paciente, composición del líquido a infundir y características propias del catéter (número de luces, tipo de material del que está hecho…etc.).

Un catéter central puede canalizarse directamente a través de una vena principal, como en el caso de los CVC y reservorio venoso subcutáneo (RVS), o a través de una vena periférica como es el caso de los PICC (catéter venoso central de inserción periférica). Para ello se suele utilizar la inserción transcutánea a ciegas, aunque actualmente está ganando terreno la técnica de punción de venas mediante ecografía.

Según el estudio EPINE 2019 la bacteriemia e infecciones asociada a catéteres ocupan el tercer puesto en cuanto a la prevalencia de las infecciones nosocomiales totales en las UCI y el cuarto a nivel hospitalario en general. (EPINE)4.

Los estafilococos, y más concretamente el Staphylococcus Aureus es el agente etiológico más frecuente de las infecciones relacionadas con el uso de catéteres venosos. El 75% de las infecciones están causadas por las diferentes especies de bacterias aerobias grampositivas. Los bacilos gramnegativos ocasionan alrededor del 20% de los episodios, y el 5 % restante son producidos por levaduras. (elsevier).

Para disminuir la prevalencia de infecciones nosocomiales asociadas al uso de catéteres venosos se han desarrollado a nivel nacional un protocolo para la prevención de bacteriemias que esta englobado en el proyecto Bacteriemia Zero, este proyecto ha sido creado por la Sociedad Española de Medicina Intensivista Crítica y Unidades Coronarias (SEMICYUC) con la colaboración de la Alianza Mundial de la Seguridad del Paciente creada por la OMS y de la Agencia de Calidad del Ministerio de Sanidad y Consumo.

Este protocolo consta de programas formativos para los profesionales sanitarios, además de la creación de una intervención estandarizada de prevención de bacteriemia relacionada con la inserción de catéteres. Esta intervención (STOP- BRC) consta de 6 procedimientos:

 

  1. Higiene adecuada de manos.
  2. Uso de Clorhexidina en la preparación de la piel.
  3. Uso de medidas de barrera total durante la inserción de los CVC.
  4. Preferencia de la vena subclavia como lugar de inserción.
  5. Retirada de CVC innecesarios.
  6. Manejo higiénico de los catéteres.

 

El desarrollo de este programa ha permitido mejorar y reforzar la higiene de manos y la inserción del CVC. También ha conseguido fortalecer la cultura de la seguridad del paciente utilizando el método de mejora de calidad e implicando la participación de los profesionales y aplicando prácticas seguras de efectividad demostrada.

 

CONCLUSIÓN

En el caso de la bacteriemia asociada a CVC, son los profesionales de enfermería los que se encargan, además del mantenimiento y de su manipulación para la administración de diferentes fármacos y hemoderivados, así como de la inserción de algunos modelos de catéteres. Es muy importante que este personal sanitario disponga de los conocimientos necesarios para aplicar los cuidados necesarios dirigidos tanto a la inserción como al mantenimiento de los CVC.

 

En este sentido, el proyecto Bacteriemia Zero emprendido en las UCI de los hospitales, se ha mostrado como un método altamente efectivo para educar al personal encargado y lograr los objetivos buscados, por lo que se ha decidido extender este proyecto al resto de servicios encargados de canalizar vías centrales. Este estudio nos permite identificar aspectos mejorables, que deben ser considerados como puntos críticos a la hora de implementar dichas medidas con el fin de garantizar la seguridad del paciente, tales como la impartición de charlas formativas dirigidas al personal de enfermería del hospital implicado en el manejo y asepsia de las vías centrales.

 

BIBLIOGRAFÍA

  1. Instituto Nacional de Estadística [Sede Web]. Madrid: Instituto Nacional de Estadística 31 de Enero de 2014 [ Acceso: 28 de Enero de 2021]. Nota de prensa, Estadística de Defunciones según la Causa de Muerte. Disponible en http://www.ine.es/prensa/np830.pdf
  2. León C, Ariza J. Guías para el tratamiento de las infecciones relacionadas con catéteres intravasculares de corta permanencia en adultos. Enferm Infecc Microbiol Clin 2004; 22 (2): 92-101
  3. Sociedad Española de Medicina Preventiva y Salud Pública. Estudio EPINE: resultados 1990-2011 [consultado 9 Dic 2013]. Disponible en: http://hws.vhebron.net/epine/Descargas/Diapos%20resultados%20EPINE%201990-2011.pdf
  4. Sociedad Española de Medicina Intensiva y Cuidados Coronarios. Programa ENVIN·UCI [consultado 9 Dic 2013]. Disponible en: http://hws.vhebron.net/envin-helics
  5. D. Rodríguez-Pardo, B. Almirante. Candidemia y catéter vascular. Actualización en infecciones relacionadas con el uso de catéteres vasculares, pp. 165-191

 

Publique con nosotros

Indexación de la revista

ID:3540

Últimos artículos