Trastorno por déficit de atención e hiperactividad en niños. Artículo monográfico.

10 febrero 2022

AUTORES

  1. Irene Ramos Navajas. Enfermera en el Hospital Universitario Miguel Servet.
  2. Lidia López Herrero. Enfermera en el Consultorio Valdemorillo.
  3. Ariana Martin Cabrero. Enfermera en el Hospital Royo Villanova.
  4. Ana Raquel Martin Serrano. Enfermera en el Hospital Nuestra Señora de Gracia.
  5. Ana María Miñana Muñoz. Enfermera en el Hospital Universitario Miguel Servet.

 

RESUMEN

El trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) es el trastorno del neurodesarrollo más frecuente en la infancia. La magnitud, determinada por su prevalencia, y su trascendencia negativa en el desarrollo del niño, hacen necesaria una evolución y un abordaje multidisciplinar en los niveles primarios de educación y salud.

El TDAH tiene un alto contenido genético, hasta el 80% de los casos presenta un familiar con las mismas características y, en muchos casos, los síntomas permanecen a lo largo de la vida de la persona. Aunque el TDAH tiene un origen orgánico, el entorno puede hacer mucho en la mejora de los problemas que van surgiendo y en la evolución de la persona afectada, previniendo la aparición de otros problemas o trastornos más graves.

 

PALABRAS CLAVE

Déficit de atención, hiperactividad, trastorno del comportamiento.

 

ABSTRACT

Attention deficit hyperactivity disorder (ADHD) is the most common neurodevelopmental disorder in childhood. The magnitude, determined by its prevalence, and its negative impact on the development of the child, make an evolution and a multidisciplinary approach necessary at the primary levels of education and health.

ADHD has a high genetic content, up to 80% of cases have a relative with the same characteristics and, in many cases, the symptoms remain throughout the person’s life. Although ADHD has an organic origin, the environment can do a lot to improve the problems that arise and in the evolution of the affected person, preventing the appearance of other more serious problems or disorders.

 

KEY WORDS

Attention deficit disorder, hyperactivity, behaviour disorder.

 

DESARROLLO DEL TEMA

El trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad es un trastorno de origen neurobiológico que se caracteriza por la presencia de tres síntomas típicos: Déficit de atención, impulsividad e hiperactividad motora y/o vocal. Se identificará como un trastorno cuando estos síntomas o los comportamientos que se deriven se observen con mucha mayor frecuencia e intensidad que en los niños/adolescentes de igual edad e interfieran en la vida cotidiana en casa, la escuela y su entorno en general. Se debe tener en cuenta que no todos los niños con este trastorno manifiestan los mismos síntomas y con la misma intensidad. Se pueden encontrar casos de niños con dificultades relacionadas con la atención, pero que no presentan un mayor grado de movimiento o mayores respuestas impulsivas que los niños de su misma edad1.

En el Manual de Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-IV), publicado por la American Psychiatric Association en su última versión, se diferencian tres tipos de trastorno dentro del TDAH:

  • Trastorno por déficit de atención con hiperactividad subtipo predominante inatento.
  • Trastorno por déficit de atención con hiperactividad subtipo predominante hiperactivo-impulsivo.
  • Trastorno por déficit de atención con hiperactividad subtipo combinado (presenta síntomas atencionales e hiperactivos-impulsivos)1.

Estudios actuales afirman que el trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad es el trastorno con mayor incidencia en la infancia. La incidencia es mayor entre niños que entre niñas, con una proporción de cuatro niños por cada niña1.

En la actualidad, se desconocen las causas directas o inmediatas del TDAH. Los avances en las técnicas de diagnóstico por imágenes y en la genética han ayudado a esclarecer algunas cuestiones, pero aún no se ha conseguido una evidencia definitiva que explique los orígenes del trastorno. Básicamente se considera un trastorno de origen neurobiológico de carácter hereditario (Barkley et al.,1999). Los estudios de Barkley et al. (1990), Biederman et al. (1992) y Pauls (1991) indican que los factores socioambientales pueden influir en la mayor gravedad de los síntomas, en un peor pronóstico del TDAH y en el aumento del riesgo de presentar trastornos o problemas asociados (trastornos emocionales, conductas inadecuadas, dificultades de aprendizaje, etc.), pero estos factores raramente se pueden considerar como la causa que genera el trastorno1.

 

La mayoría de los niños con TDAH presentará un trastorno añadido, alrededor del 32%, dos y el 11% tres o más trastornos añadidos. Alrededor del 19-26% presenta un trastorno de aprendizaje, es decir, que su rendimiento en lectura, cálculo o expresión escrita es inferior al que se espera por edad, escolarización y nivel de inteligencia. Es frecuente identificar estas dificultades en niños predominantemente inatentos, ya que son éstos los que por falta de concentración, planificación y organización se encuentran con mayores impedimentos para seguir el curso escolar1.

El TDAH causa una morbilidad importante y debe ser tratada. El objetivo del tratamiento es disminuir la frecuencia e intensidad de los síntomas y facilitar estrategias para su control, ya que en la actualidad no se dispone de un tratamiento curativo2.

Para lograr un tratamiento exitoso hay que explorar la actitud de la familia hacia el trastorno y su tratamiento, conocer sus experiencias previas y sus expectativas, llegar a acuerdos sobre los objetivos a alcanzar y los medios que se pondrán en marcha para lograrlo y explicar claramente los beneficios esperados, así como los efectos secundarios o riesgos potenciales que se deben vigilar3,4.

El tratamiento farmacológico se considera la primera opción de tratamiento en los niños con TDAH mayores de seis años con síntomas y disfunción severos, o en los que presentando síntomas moderados no responden al tratamiento no farmacológico2.

Las Guías de Práctica Clínica indican los psicoestimulantes como fármacos de primera elección. En España, el único psicoestimulante comercializado como indicación para el TDAH es el metilfenidato, siendo el fármaco más utilizado, coste-efectivo y sobre el que más experiencia clínica se dispone para el tratamiento del TDAH5,6.

El profesional sanitario debe acordar con el niño y la familia el tratamiento que disminuya el impacto del trastorno y le ayude a alcanzar su máximo potencial en todos los ámbitos. Debe realizarse un seguimiento regular para comprobar la persistencia o control de síntomas, así como la eficacia y tolerancia del tratamiento farmacológico. Para suspender la medicación, el paciente no debe presentar síntomas y debe tener habilidades para compensar las demandas personales, familiares, escolares o laborales. La mala adherencia al tratamiento origina pobres resultados. Son determinantes de pobre adherencia el comienzo tardío del tratamiento, la mayor edad, la historia familiar de TDAH, las dosis múltiples y la falta de revisión regular por el profesional responsable. Si el paciente entiende y participa en el diseño de su tratamiento y encuentra mejoría en los síntomas, la probabilidad de adherencia es mayor. Antes de iniciar el tratamiento, es muy importante realizar una completa anamnesis para conocer los síntomas presentes y explorar al paciente para poder valorar con objetividad si los síntomas que pueda presentar tras iniciar el tratamiento son o no atribuibles a éste2.

 

CONCLUSIONES

La etiopatogenia del TDAH se sabe que es multifactorial, donde convergen causas genéticas y neurobiológicas, con una modulación ambiental. El diagnóstico ha de ser clínico, basado en una amplia anamnesis, que permita identificar, no solo los síntomas nucleares del trastorno, sino sus áreas de disfunción asociada. El tratamiento es multimodal: farmacológico y psicosocial, esperando una mejoría funcional y control continuo de los síntomas.

 

BIBLIOGRAFÍA

  1. Mena Pujol B, Nicolau Palou R, Salat Foix L, Tort Almeida P, Romero Roca B. El alumno con TDAH, Guía Práctica para Educadores. 2 ed. Barcelona: Mayo ediciones; 2006.
  2. Lora Espinosa A, Díaz Aguilar MJ. Abordaje del trastorno por déficit de atención con/sin hiperactividad desde la visión del pediatra de cabecera. Rev Pediatr Aten Primaria. 2011; 13 (20):115-126.
  3. Pliszka S. AACAP Work Group on Quality Issues. Practice parameter for the assessment and treatment of children and adolescents with attention-deficit/hyperactivity disorder. J Am Acad Child Adolesc psychiatry. 2007;46:894-921.
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  5. Newcorn JH, Kratochvil CJ, Allen AJ, Casat CD, Ruff DD, Moore RJ et al. Atomoxetine/Methylphenidate Comparative Study Group. Atomoxetine and osmotically released methylphenidate for the treatment of attention deficit hyperactivity disorder: acute comparison and differential response. Am J Psychiatry. 2008;165:721-30.
  6. Biderman J, Spencer TJ. Psychopharmacological interventions. Child Adolesc Psychiatr Clin N Am. 2008;17:439-58.

 

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