AUTORES
- Laura Esteras Martínez. Diplomada en Fisioterapia por la Universidad de Valladolid. Servicio Aragonés de Salud, Zaragoza.
- Ana Conejos Merita. Graduada en Enfermería. Centro de Rehabilitación Psicosocial San Juan de Dios. Teruel.
- Raquel Morales Ferruz. Licenciada en Medicina y Cirugía. Pediatra de Atención Primaria. Centro salud Calatayud sur. Zaragoza.
- Marta Narváez Salazar. Facultativo Especialista de Área. Ginecología y Obstetricia. Hospital de Barbastro, Huesca.
- Sara Sierra Cebollada: Diplomada en Enfermería por la Universidad de Zaragoza. Hospital Universitario Lozano Blesa, Zaragoza.
- Belén Zabala Ruiz. Licenciada en Odontología por la Universidad de Zaragoza. Odontóloga en Centro de Salud Calatayud, SALUD Aragón.
RESUMEN
La Asociación Internacional para el Estudio del Dolor (IASP) define el dolor neuropático como el dolor causado por lesiones o enfermedades del sistema somatosensorial1. Se define como un tipo de dolor caracterizado por hormigueo, ardor y/o dolor punzante.
El tratamiento farmacológico suele ser el abordaje más habitual. Pero además de ser costoso, se ha visto que no siempre es el más efectivo. Por lo que el empleo del ejercicio físico, podría ahorrar costos en lo que se refiere al tratamiento del dolor neuropático. Ya que estudios observacionales, han demostrado que las personas más activas físicamente tienen un menor riesgo de desarrollarlo en comparación con las personas menos activas.
En este artículo revisaremos los síndromes de dolor neuropático más frecuentes y la práctica de ejercicio físico como modo de tratamiento óptimo.
PALABRAS CLAVE
Dolor neuropático, ejercicio físico.
ABSTRACT
The International Association for the Study of Pain (IASP) defines neuropathic pain as pain caused by injuries or diseases of the somatosensory system. It is defined as a type of pain characterized by tingling, burning and/or stabbing pain. Drug treatment is often the most common approach. But in addition to being expensive, it has not always been the most effective. As for the use of physical exercise, it could save costs when it comes to the treatment of neuropathic pain. Because observational studies have shown that more physically active people have a lower risk of developing it compared to less active people.
KEY WORDS
Neuropathic pain, physical exercise.
INTRODUCCIÓN
En líneas generales, cuando hablamos de dolor neuropático, estamos hablando de dolor severo, a veces disfuncional y casi siempre persistente.
Se estima que el 3% de la población mundial sufre de dolor neuropático, aunque este dato puede estar subestimado por la diversidad de condiciones que pueden estar implicadas en este tipo de dolor2.
Son varias las entidades patológicas que pueden cursar con el signo de dolor neuropático3:
A. Síndrome doloroso regional complejo (SDRC):
Este síndrome se puede dividir en dos tipos:
Tipo I: Corresponde a lo que antes se llamaba distrofia simpática refleja. Ocurre con frecuencia a consecuencia de un trauma o por inmovilización de un miembro tras una fractura ósea.
Tipo II: También denominado causalgia. Posee una presentación similar al anterior, pero este caso deriva de la lesión en estructuras nerviosas.
Estos dos síndromes presentan las siguientes características comunes:
1) dolor que no corresponde a una distribución anatómica (no es radicular, no sigue la distribución de un nervio periférico).
2) el miembro afectado puede o no presentar cambios de temperatura (elevada o por debajo de lo normal), lo que evidencia que el sistema nervioso simpático puede estar involucrado.
3) con el tiempo puede presentar cambios en el trofismo de la piel.
4) en el estadio avanzado se produce atrofia muscular.
B. Dolor del miembro fantasma:
Este tipo de dolor acontece tras haber sufrido una amputación ya sea de tipo traumática o terapéutica. Y lo experimentan alrededor del 10-90% de los pacientes que sufren amputaciones.
El paciente puede presentar diversos síntomas en la extremidad fantasma (hormigueo, pinchazos, quemazón), pero raramente dolor en presencia de parestesias.
El dolor en pacientes amputados es un modelo que permite tomar consciencia la complejidad del dolor neuropático en toda su magnitud, ya que puede presentar varios tipos de dolor de forma simultánea: dolor fantasma; SDRC sin o con componente simpático en el área del muñón; dolor producido por neuromas y dolor neuropático en el área de la cicatriz quirúrgica.
C. Neuralgia postherpética:
La prevalencia de infección por herpes Zoster aumenta con la edad y en estados de inmunosupresión (quimioterapia, AIDS). Las áreas más afectadas son los dermatomas torácicos (T5-T10) y la cara (la rama V1 del trigémino, pero puede afectar también a otras áreas del cuerpo como las extremidades inferiores (30% de los casos).
D. Dolor neuropático inducido por quimioterapia:
En la mayoría de los casos, la neuropatía comienza por los dedos de los pies para luego comprometer los dedos de las manos, pero puede extenderse también a las cuatro extremidades y ser de tal intensidad que llegue a ser invalidante.
Los pacientes se pueden quejar de dolor, pinchazos y agujas, vibración, y pérdida de propiocepción.
E. Dolor neuropático inducido por radiación:
Los pacientes que reciben tratamiento de radioterapia para el tratamiento de cáncer de mama o linfoma pueden desarrollar plexopatía del plexo braquial hasta seis meses después de finalizado el tratamiento.
Otros tipos de dolor neuropático pueden ser: dolor de tipo central por afectación talámica, dolor generado a nivel de la médula espinal, y neuropatías periféricas como las radiculopatías, neuropatías diabéticas u otras. Patologías que comúnmente han sido abordadas a través de tratamientos quirúrgicos y/o medicamentosos4 de gran coste y para las cuales no siempre se ha encontrado un resultado óptimo.
Lo que nos lleva hacia la búsqueda de otras opciones terapéuticas más efectivas y de menor coste como es la actividad física.
OBJETIVO
Objetivo principal:
– Revisar la bibliografía existente sobre dolor neuropático y síndromes de dolor neuropático.
Como objetivos secundarios:
– Evidenciar la efectividad y eficiencia del uso de ejercicio físico como abordaje del dolor neuropático.
– Prevenir la aparición de dolor neuropático a través de la práctica de actividad física.
MATERIAL Y MÉTODO
Para la elaboración de este trabajo, se ha llevado a cabo una investigación de diferentes revisiones bibliográficas y estudios sobre la literatura científica existente. Se ha realizado una búsqueda sistemática en las principales bases de datos: Pubmed, Medline, Pedro, Scielo, Web Of Science y Elservier, seleccionando artículos de los últimos quince años y con las palabras clave: Dolor Neuropático y Ejercicio Físico.
RESULTADOS
Varios estudios han evidenciado que el empleo del ejercicio físico aeróbico de intensidad moderada-intensa6 como puede ser el running y/o la natación resultan ser efectivos para el tratamiento del dolor neuropático.
Y ya no solo para su tratamiento, sino que también para su prevención. Pues se ha visto que la práctica de actividad física de forma regular (2-3 días por semana), reduce el riesgo de padecer dolor crónico en un 10-15% en personas menores de 65 años, y en un 20% en aquellas con una edad superior a los 65 años7.
Por contra, se cree que las personas que nunca practican ejercicio físico aumentarán así sus probabilidades de padecer dolor neuropático en comparación con aquellas que sí lo practican.
CONCLUSIONES
Los múltiples beneficios que se obtienen de la práctica de actividad física a nivel del organismo y sus diferentes sistemas8 son ya conocidos desde hace tiempo.
De lo que no éramos conscientes hasta hace no mucho, es de que la práctica de actividad deportiva de tipo aeróbica y de resistencia, fuese a tener un impacto tan importante en el tratamiento y la prevención del dolor de tipo neuropático.
Con el empleo del ejercicio físico correctamente dosificado en cuanto a tiempo e intensidad se refiere, podemos atajar patologías y problemas neuropáticos, sin que esto suponga un gran coste y garantizando la no existencia de recidivas en su aparición.
En definitiva, el ejercicio es, en la mayoría de los casos, una de las mejores estrategias a la hora de manejar el dolor neuropático crónico. Por lo que entender los mecanismos del dolor y la analgesia que produce el ejercicio físico moderado-intenso7 debe ser algo de obligada necesidad tanto por parte del paciente, como por parte del profesional sanitario a la hora de tratarlo.
BIBLIOGRAFÍA
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