La bulimia nerviosa continúa siendo un problema mundial. Artículo monográfico

2 mayo 2023

 

AUTORES

  1. Iris García Solanas. Enfermera Hospitalización en Hospital Universitario Miguel Servet,Zaragoza, España.
  2. Nuttanich Chompoonuch Yodsawad. Enfermera Hospitalización en Hospital Universitario Miguel Servet, Zaragoza, España.
  3. Andrea Paúl Nadal. Enfermera de UCI pediátrica en Hospital Universitario Miguel Servet, Zaragoza, España.
  4. Carlos Soria Lahuerta. Enfermero Hospitalización en Hospital Universitario Miguel Servet, Zaragoza, España.
  5. Carolina Herrero Lobato. Enfermera Hospitalización en Hospital Universitario Miguel Servet, Zaragoza, España.
  6. Macarena García Varona. Enfermera Hospitalización en Hospital Miguel Servet, Zaragoza.

 

RESUMEN

La bulimia nerviosa es un tipo de trastorno alimentario caracterizado por episodios de atracones recurrentes, seguidos de conductas compensatorias para evitar aumentar de peso y evitar la culpa. La bulimia afecta a personas de todas las edades, pero es particularmente común en la adolescencia.

Por el momento se desconoce la causa exacta de la bulimia. Los factores genéticos, psicológicos, familiares, sociales o incluso culturales pueden desempeñar un papel importante en su desarrollo. La bulimia probablemente se deba a más de un factor. El tratamiento de elección para la bulimia es una combinación de fármacos y psicoterapia.

Es común confundir bulimia con anorexia, aunque las dos forman parte de los trastornos alimentarios, tienen diferencias significativas.En España, el aumento de casos de bulimia entre los adolescentes es una preocupación creciente y es importante comprender los factores que contribuyen a este trastorno.

PALABRAS CLAVE

Bulimia nerviosa, adolescencia, trastorno alimentario.

ABSTRACT

Bulimia nervosa is a type of eating disorder characterized by recurrent binge eating episodes, followed by compensatory behaviors to prevent weight gain and avoid guilt. Bulimia affects people of all ages, but it is particularly common in adolescence.

The exact cause of bulimia is unknown. Genetic, psychological, family, social or even cultural factors can play an important role in its development. Bulimia is probably due to more than one factor. The treatment of choice for bulimia is a combination of drugs and psychotherapy.

It is common to confuse bulimia with anorexia, although both are part of eating disorders, they have significant differences.In Spain, the increase in cases of bulimia among adolescents is a growing concern, and it is important to understand the factors that contribute to this disorder.

KEY WORDS

Bulimia nervosa, adolescence, eating disorder.

DESARROLLO DEL TEMA

La bulimia nerviosa es un trastorno alimentario definido por el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5), como episodios de atracones recurrentes, seguidos de conductas compensatorias para evitar la ganancia de peso y evitar la culpa1.

Los atracones recurrentes se caracterizan por:

  • Comer en un período de tiempo discreto (dentro de cualquier período de 2 horas), una cantidad de alimentos que es definitivamente más grande de lo que la mayoría de las personas comería durante un período de tiempo similar y en circunstancias similares. La cantidad de comida puede exceder en muchos casos las 3000 kcal.
  • Una sensación de falta de control sobre comer durante el episodio, es decir una sensación de que uno no puede dejar de comer o controlar qué o cuánto está comiendo. Estos episodios suelen realizarse a escondidas.

 

Estos episodios de atracones también están asociados con al menos tres de los siguientes aspectos:

  • Comer más rápido de lo normal.
  • Comer hasta sentirse incómodamente lleno.
  • Comer grandes cantidades de alimentos cuando no se siente físicamente hambriento.
  • Comer solo debido a sentirse avergonzado por la cantidad que uno está comiendo.
  • Sentirse disgustado consigo mismo, deprimido o muy culpable después.

 

Además de los atracones, la bulimia nerviosa también implica comportamientos compensatorios para prevenir el aumento de peso, de carácter inapropiado y recurrente. Dichos comportamientos son por ejemplo: vómitos autoinducidos, uso indebido de laxantes, diuréticos u otros medicamentos, ayuno o ejercicio excesivo. Los atracones y los comportamientos compensatorios inapropiados ocurren, en promedio, al menos una vez a la semana durante tres meses.

BULIMIA A LO LARGO DE LA HISTORIA:

La bulimia es un trastorno alimentario que se ha vuelto más frecuente en los tiempos modernos, particularmente en el mundo occidental. Sin embargo, las raíces de esta condición se remontan a la antigüedad2. En este artículo, exploramos los antecedentes históricos de la bulimia.

Los primeros relatos conocidos de bulimia se pueden encontrar en textos griegos y romanos antiguos. En estas sociedades, no era raro que las personas ricas se entregarán a fiestas y banquetes, donde consumían grandes cantidades de comida y vino. Después, a menudo inducen el vómito o usan laxantes para deshacerse del exceso de comida y evitar el aumento de peso.

La práctica de purgar después de comer se consideraba un medio para mantener un físico delgado y atractivo, aspecto muy valorado en la antigua Grecia y Roma. De hecho, algunos historiadores creen que la prevalencia de la bulimia en estas sociedades puede haber sido influenciada por el ideal cultural de belleza y el deseo de lograr una cierta estética.

Avanzando en el tiempo, durante la Edad Media en Europa, el ayuno era una práctica común entre las comunidades religiosas, con individuos que a menudo pasaban sin comida durante largos períodos de tiempo. Sin embargo, esta privación extrema podría conducir a episodios de atracones, seguidos de purgas u otras formas de autolesión. Fue durante este tiempo que el término «bulimia» se utilizó por primera vez para describir este patrón de comportamiento.

En los siglos XVII Y XVIII, la bulimia fue reconocida como una condición médica, con médicos y científicos que la describen como un tipo de «indigestión nerviosa». Sin embargo, no fue hasta finales del siglo XIX y principios del siglo XX que la bulimia comenzó a ser estudiada en profundidad.

El auge del psicoanálisis y el campo de la psiquiatría a principios del siglo XX permitió una comprensión más matizada de la bulimia y otros trastornos alimentarios. Sigmund Freud, el padre del psicoanálisis, vio la bulimia como una manifestación de problemas psicológicos más profundos, como la ansiedad y la baja autoestima.

Durante el siglo pasado, nuestra comprensión de la bulimia ha seguido evolucionando, con investigaciones que apuntan a una compleja interacción de factores biológicos, psicológicos y ambientales. Hoy en día, la bulimia es reconocida como una condición de salud mental grave que requiere tratamiento y apoyo especializado.

Podemos decir que la bulimia tiene una historia larga y compleja, que se remonta a la antigüedad. Si bien los ideales y prácticas culturales que pueden haber influido en su prevalencia han cambiado a lo largo de los años, los factores psicológicos y fisiológicos subyacentes siguen siendo los mismos. Es esencial que continuemos investigando y entendiendo esta condición para apoyar mejor a aquellos que están luchando con ella hoy.

PREVALENCIA:

En Europa, la prevalencia estimada en las mujeres de la de la bulimia nerviosa es del 1-2% y de la anorexia nerviosa es de un 1-4%. En los varones, la prevalencia es significativamente inferior, siendo del 0,3-0,7% para el conjunto de los TCA3. Sin embargo, es importante tener en cuenta que estos números pueden ser una subestimación, ya que muchas personas con bulimia pueden no buscar tratamiento o pueden no ser diagnosticadas.

La bulimia generalmente se desarrolla en la adolescencia o en la edad adulta temprana, aunque puede ocurrir a cualquier edad. A menudo se asocia con otras afecciones de salud mental como ansiedad, depresión o abuso de sustancias y también puede desencadenarse por eventos estresantes de la vida, como una ruptura o un conflicto familiar.

Uno de los aspectos más preocupantes de la bulimia es su potencial de graves consecuencias para la salud física. La purga frecuente asociada con el trastorno puede provocar desequilibrios electrolíticos, deshidratación y daño al sistema digestivo. La bulimia a largo plazo también puede provocar problemas dentales, daño esofágico y otras complicaciones graves de salud.

A pesar de estos riesgos, muchas personas con bulimia pueden tener dificultades para buscar ayuda o recibir un tratamiento eficaz. Esto puede deberse a sentimientos de vergüenza, falta de comprensión sobre el trastorno o dificultad para acceder a los recursos apropiados. Es importante que los proveedores de atención médica, los seres queridos y las propias personas estén al tanto de los signos y síntomas de la bulimia y busquen ayuda cuando sea necesario.

IMPACTO DE LA BULIMIA EN LA FAMILIA:

La bulimia nerviosa puede tener un impacto significativo en las familias de las personas que sufren del trastorno4. El impacto puede manifestarse de varias maneras, incluyendo:

  • Angustia emocional: Los miembros de la familia pueden sentirse preocupados, frustrados e impotentes al ver a su ser querido luchar contra el trastorno. También pueden sentirse culpables, responsabilizándose a sí mismos de la situación.
  • Carga financiera: El tratamiento para la bulimia puede ser costoso, y las familias pueden tener que asumir los costos de la atención médica, la terapia y los medicamentos. Esto puede causar tensión financiera y estrés.
  • Interrupción de la vida familiar: La bulimia puede interrumpir las rutinas y actividades familiares. Los miembros de la familia pueden necesitar ajustar sus horarios para acomodar el tratamiento del paciente, y los eventos sociales pueden cancelarse o posponerse.
  • Tensión en la relación: El estrés de cuidar a un ser querido con bulimia puede tensar las relaciones dentro de la familia. Los miembros de la familia pueden volverse irritables, impacientes o resentidos, lo que puede llevar a conflictos y discusiones.
  • Impacto negativo en los niños: Si el paciente tiene hijos, pueden verse afectados por la enfermedad de los padres. Los niños pueden sentirse descuidados o confundidos por el comportamiento de sus padres, y el estrés de la situación puede afectar su bienestar emocional.
  • Comportamiento habilitador: Los miembros de la familia pueden permitir inadvertidamente el comportamiento del paciente al proporcionar acceso a atracones de comida o evitar discutir el problema para evitar conflictos.

 

Es importante que las familias busquen apoyo y tratamiento para sí mismas, así como para el paciente, para manejar eficazmente el impacto de la bulimia en la familia. La terapia familiar puede ser beneficiosa para abordar los problemas de comunicación y relación y apoyar la recuperación del paciente.

DIFERENCIAS ENTRE BULIMIA Y ANOREXIA:

La anorexia y la bulimia son trastornos de la conducta alimentaria. Ambos pueden tener graves consecuencias físicas y psicológicas, por lo que gran parte de la población puede confundirlos y pensar que pertenecen al mismo trastorno. Pero existen diferencias significativas entre los dos.

Según el manual DSM-5, para poder diagnosticar la bulimia son necesarios sólo 2 criterios diagnósticos: los atracones recurrentes y las conductas compensatorias inadecuadas, con una recurrencia de, al menos, una vez a la semana durante 3 meses. En cambio, para hacer el diagnóstico de la anorexia el paciente tiene que cumplir con 3 criterios diagnósticos: restricción de la ingesta energética (peso inferior al mínimo esperado), miedo intenso a ganar peso y la alteración en la autopercepción en forma de distorsión de la imagen corporal con negación de la gravedad del bajo peso5.

Haciendo un análisis categorizado, podemos además destacar las siguientes diferencias:

  • Pérdida de peso: La anorexia nerviosa se caracteriza por una pérdida de peso significativa y un miedo intenso a aumentar de peso. Las personas con anorexia pueden tener una imagen corporal distorsionada y verse a sí mismas con sobrepeso, incluso cuando tienen bajo peso2. En contraste, las personas con bulimia pueden mantener un peso normal o tener sobrepeso.
  • Hábitos alimenticios: Las personas con anorexia a menudo restringen severamente su ingesta de alimentos, pueden evitar ciertos tipos de alimentos y pueden tener comportamientos rituales en torno a los alimentos. En contraste, las personas con bulimia a menudo tienen episodios de atracones, seguidos de comportamientos compensatorios como vómitos, uso de laxantes o ejercicio excesivo.
  • Síntomas físicos: La anorexia puede provocar síntomas físicos como pérdida extrema de peso, fatiga, mareos, estreñimiento y pérdida de cabello. La bulimia puede provocar síntomas físicos como erosión del esmalte dental, problemas gastrointestinales y desequilibrios electrolíticos.
  • Síntomas psicológicos: Ambos trastornos pueden provocar ansiedad, depresión y comportamientos obsesivo-compulsivos. En el caso de la anorexia, las personas pueden experimentar una sensación de control sobre sus vidas a través de sus conductas alimentarias restrictivas, mientras que las personas con bulimia pueden experimentar vergüenza y culpa por su ciclo de atracones y purgas.
  • Tratamiento: El tratamiento para ambos trastornos puede incluir psicoterapia (como terapia cognitivo-conductual), antidepresivos y asesoramiento nutricional. Sin embargo, el tratamiento para la anorexia a menudo se centra en la restauración y estabilización del peso, mientras que el tratamiento para la bulimia puede centrarse en romper el ciclo de atracones-purgas y abordar los problemas emocionales subyacentes.

 

TRATAMIENTO DE LA BULIMIA:

El tratamiento para la bulimia generalmente implica una combinación de terapia, medicamentos y asesoramiento nutricional. El objetivo principal del tratamiento es ayudar al individuo a romper el ciclo de atracón-purga y desarrollar una relación saludable con los alimentos y su cuerpo.

Estas son algunas opciones de tratamiento comunes para la bulimia6:

  • Terapia cognitivo-conductual (TCC): Este es un tipo de terapia que ayuda a las personas a identificar y cambiar los patrones de pensamiento y comportamientos negativos que contribuyen a la bulimia. La TCC puede ayudar a las personas a desarrollar habilidades y estrategias de afrontamiento para lidiar con los desencadenantes y factores estresantes que pueden conducir a atracones y purgas. La terapia cognitivo-conductual (TCC) es una de las formas más efectivas de psicoterapia para la bulimia.
  • Terapia interpersonal (IPT): Este es un tipo de terapia que se centra en mejorar las relaciones y las habilidades de comunicación. IPT puede ayudar a las personas con bulimia a abordar cualquier problema interpersonal subyacente que pueda contribuir a su trastorno alimentario.
  • Medicamentos: Aunque no existe un medicamento diseñado específicamente para tratar la bulimia, algunos medicamentos antidepresivos pueden ser útiles para reducir los síntomas. Los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) son los medicamentos más comúnmente recetados para la bulimia. Estos medicamentos pueden ayudar a reducir la frecuencia de los episodios de atracones y purgas y mejorar el estado de ánimo y la ansiedad.
  • Terapia familiar: La terapia familiar puede ser útil para adolescentes y adultos jóvenes con bulimia. El tratamiento basado en la familia (FBT, por sus siglas en inglés) se enfoca en ayudar a toda la familia a apoyar la recuperación del individuo. FBT implica trabajar con la familia para crear un ambiente de apoyo, establecer patrones de alimentación regulares y ayudar al individuo a desarrollar habilidades de afrontamiento.
  • Grupos de apoyo: Los grupos de apoyo pueden proporcionar a las personas con bulimia un sentido de comunidad y apoyo. Los grupos de apoyo pueden ser en persona o en línea y son dirigidos por compañeros que tienen experiencias similares. Los grupos de apoyo pueden ser un recurso valioso para las personas que pueden sentirse aisladas o avergonzadas por su trastorno.
  • Tratamiento para pacientes hospitalizados o ambulatorios: Los programas de tratamiento para pacientes hospitalizados o ambulatorios pueden brindar atención y apoyo integrales a las personas con bulimia. El tratamiento hospitalario a menudo se recomienda para personas que son médicamente inestables o que tienen trastornos alimentarios graves. El tratamiento ambulatorio puede ser apropiado para personas que están médicamente estables y tienen un sistema de apoyo sólido.

 

Con la ayuda del tratamiento adecuado, las personas con bulimia pueden recuperarse y llevar una vida saludable y satisfactoria.

BIBLIOGRAFÍA

  1. MedlinePlus [sede Web]. NIH; 2020 [acceso 23 de marzo de 2023]. Bulimia [4 pantallas]. Disponible en: https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/000341.htm
  2. Muhlheim L. History of Eating Disorders. VerywellMind [Internet]. 2020 [acceso 23 de marzo de 2023]. Disponibleen:https://www.verywellmind.com/history-of-eating-disorders-4768486
  3. Arija-Val V, Santi-Cano MJ, Novalbos-Ruiz JP Canals J, Rodríguez-Martín A. Caracterización, epidemiológica y tendencias de los trastornos de la conducta alimentaria. Nutr. Hosp. [Internet]. 2022 [citado 2023 Abr 01]; 39(spe2): 8-15. Disponible en: http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0212-16112022000500003&lng=es
  4. Gilbert AA, Shaw SM, Notar MK. The impact of eating disorders on family relationships. Eating Disorders. 2000 [Acceso 23 de marzo de 2023]; 8:4, 331-45, DOI: 10.1080/10640260008251240
  5. MedlinePlus [sede Web]. NIH; 2022 [acceso 23 de marzo de 2023]. Anorexia [5 pantallas]. Disponible en: https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/000362.htm
  6. Lechuga L, Gámiz N. Trastornos de la Conducta Alimentaria [Internet]. 2005 [acceso 23 de marzo de 2023]; 2: 142-57. Disponible en: https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/1382754.pdf

 

Publique con nosotros

Indexación de la revista

ID:3540

Últimos artículos