Trombosis venosa profunda: revisión monográfica.

17 julio 2023

AUTORES

  1. Rocio Almagro Obra. Enfermera Hospitalización, HRV, Zaragoza.
  2. Lourdes Lasaosa Pes. Enfermera en UCI, HRV, Zaragoza.
  3. Clara Prieto Giménez. Enfermera Hospital Royo Villanova, Zaragoza.
  4. Leticia Añaños Blazquez. Matrona/Enfermera C.A.P Valdespartera.
  5. Beatriz Fenero Allué. Enfermera Correturnos HRV, Zaragoza.
  6. Sandra Valero Barrios. Enfermera urgencias HRV, Zaragoza.

 

RESUMEN

La trombosis venosa profunda o TVP, es un coágulo sanguíneo que se forma en una vena profunda en el cuerpo. Suele ocurrir en las piernas o los muslos. Si la vena se inflama, esta afección se llama tromboflebitis. Una trombosis venosa profunda, puede desprenderse y causar un problema serio en los pulmones conocido como embolia pulmonar, un infarto o un derrame.” Para entender mejor el concepto de trombosis venosa profunda debemos tener claros los conceptos de venas y arterias: las arterias son los vasos sanguíneos que llevan sangre con oxígeno del corazón a las demás partes del cuerpo. Las venas regresan la sangre sin oxígeno de vuelta al corazón. La incidencia anual estimada de trombosis venosa profunda (TVP) en la población general es 1-2/1000 habitantes. Incluso cuando se trata correctamente, 1-8% de los pacientes desarrollan un embolismo pulmonar (EP) frecuentemente mortal, mientras que hasta 40% de los pacientes desarrollarán un síndrome postflebítico (o postrombótico) y 4% hipertensión pulmonar tromboembólica crónica.

 

PALABRAS CLAVE

Trombosis venosa profunda, venas, arterias, sistema circulatorio.

 

ABSTRACT

“Deep vein thrombosis, or DVT, is a blood clot that forms in a vein deep in the body. It usually occurs on the legs or thighs. If the vein becomes inflamed, this condition is called thrombophlebitis. A deep vein thrombosis can break loose and cause a serious problem in the lungs known as a pulmonary embolism, a heart attack, or a stroke.” To better understand the concept of deep vein thrombosis, we must be clear about the concepts of veins and arteries: arteries are the blood vessels that carry oxygen-rich blood from the heart to other parts of the body. Veins return oxygen-depleted blood back to the heart. The estimated annual incidence of deep vein thrombosis (DVT) in the general population is 1-2/1000 inhabitants. Even when properly treated, 1-8% of patients develop a frequently fatal pulmonary embolism (PE), while up to 40% of patients will develop postphlebitic (or postthrombotic) syndrome and 4% chronic thromboembolic pulmonary hypertension.

 

KEY WORDS

Deep vein thrombosis, veins, arteries, circulatory system.

 

DESARROLLO DEL TEMA

Definimos trombosis venosa profunda como “la trombosis venosa profunda o TVP, es un coágulo sanguíneo que se forma en una vena profunda en el cuerpo. Suele ocurrir en las piernas o los muslos. Si la vena se inflama, esta afección se llama tromboflebitis. Una trombosis venosa profunda, puede desprenderse y causar un problema serio en los pulmones conocido como embolia pulmonar, un infarto o un derrame.” Para entender mejor el concepto de trombosis venosa profunda debemos tener claros los conceptos de venas y arterias: las arterias son los vasos sanguíneos que llevan sangre con oxígeno del corazón a las demás partes del cuerpo. Las venas regresan la sangre sin oxígeno de vuelta al corazón1.

Existen dos tipos de venas en el cuerpo:

  • Las venas superficiales, que están justo debajo de la superficie de la piel.
  • Las venas profundas, que se localizan a niveles profundos en los músculos.

Las paredes de las venas son lisas. Esto ayuda a que la sangre fluya libremente y se mezcle con agentes presentes naturalmente (anticoagulantes) en la sangre que evitan que las células sanguíneas se coagulan. La sangre que no fluye libremente y no se mezcla con los anticoagulantes tiene más probabilidad de ocasionar coágulos sanguíneos. Una TVP puede tener graves consecuencias. Si un coágulo sanguíneo se desprende, puede desplazarse al torrente sanguíneo y obstruir el flujo de sangre a los pulmones. Aunque rara, esta complicación, llamada embolismo pulmonar, puede ser fatal. Aunque un coágulo sanguíneo no se desprenda, puede causar un daño permanente a las válvulas de la vena. Este daño puede conducir a problemas a largo plazo en las piernas, como dolor, inflamación y úlceras.

La incidencia anual estimada de trombosis venosa profunda (TVP) en la población general es 1-2/1000 habitantes. Incluso cuando se trata correctamente, 1-8% de los pacientes desarrollan un embolismo pulmonar (EP) frecuentemente mortal, mientras que hasta 40% de los pacientes desarrollarán un síndrome postflebítico (o postrombótico) y 4% hipertensión pulmonar tromboembólica crónica2.

Pruebas para diagnosticar TVP: La mayoría de los trombos venosos no tienen manifestaciones cuando se detectan por primera vez mediante métodos objetivos, probablemente porque no obstruyen totalmente la vena y debido a la existencia de circulación colateral3. Incluso dentro de la pequeña fracción de pacientes con trombosis venosa profunda en las extremidades inferiores que tienen síntomas, menos de un tercio se presenta con el clásico síndrome de malestar en la pierna, edema, distensión venosa, y dolor a la dorsiflexión forzada del pie (signo de Homan). Cuando inicialmente se atribuyen los síntomas clínicos a la trombosis venosa profunda, la valoración mediante métodos objetivos muestra que ésta es correcta en menos de la mitad de las veces. Las pruebas que se realizan para el diagnóstico son:

  1. Ultrasonido dúplex: Esta es la prueba más común de TVP. El ultrasonido usa ondas sonoras de alta frecuencia que hacen eco en el cuerpo, como la tecnología usada para revisar el bienestar de un bebé en gestación. Esto crea una imagen de los vasos sanguíneos. El ultrasonido dúplex combina la tecnología tradicional de ultrasonido con la tecnología Doppler, que genera una imagen de color que muestra la sangre mientras fluye por el cuerpo. El ultrasonido no es invasivo y es indoloro. Se puede repetir regularmente porque no requiere radiación. Si no tiene un coágulo sanguíneo, el ultrasonido dúplex puede ser útil para revelar otras causas de sus síntomas.
  2. Imagen de resonancia magnética (MRI): Una MRI produce imágenes transeccionales detalladas de las estructuras que hay dentro del cuerpo, incluyendo los vasos sanguíneos y las venas. La prueba es indolora y no invasiva. Aunque se usa con menos frecuencia, algunos médicos pueden usar una MRI para ubicar los coágulos sanguíneos en la pelvis y el muslo. La MRI permite que ambas piernas se vean al mismo tiempo. Sin embargo, no se puede usar para pacientes con ciertos dispositivos implantados, como marcapasos.
  3. Venografía: el médico inyecta una solución (o tinte) de contraste en una vena en la parte superior del pie. La solución se mezcla con la sangre y fluye por las venas. Una radiografía de la pierna afectada mostrará entonces si hay alguna obstrucción en las venas de la pantorrilla y el muslo. La venografía se usa pocas veces porque es invasiva y requiere radiación.
  4. Dimero –D: El dímero D es un producto de degradación del coágulo de fibrina polimerizada, que se determina en la sangre mediante técnicas inmunológicas cualitativas (látex) o cuantitativas (ELISA). Los niveles se encuentran elevados en pacientes con TVP reciente, así como en otras situaciones clínicas, como cirugía mayor, traumatismos, embarazo y cáncer. El dímero D es un marcador sensible, pero no específico de TVP y su valor real reside en un resultado negativo que sugiere baja probabilidad de TVP (alto valor predictivo negativo >90%), por lo que se considera una prueba idónea para descartar TVP, pero en ningún caso para confirmar el diagnóstico. La incorporación del dímero D al algoritmo diagnóstico simplifica el tratamiento de los pacientes con sospecha de TVP4.

 

BIBLIOGRAFÍA

  1. P. Prandoni, F. Noventa, A. Ghirarduzzi, V. Pengo, E. Bernardi, R. Pesavento, et al.The risk of recurrent venous thromboembolism after discontinuing anticoagulation in patients with acute proximal deep vein thrombosis or pulmonary embolism. A prospective cohort study in 1,626 patients Haematologica, 92 (2007), pp. 199-205.
  2. T. Baglin, R. Luddington, K. Brown, C. Baglin Incidence of recurrent venous thromboembolism in relation to clinical and thrombophilia risk factors: Prospective cohort study. Lancet, 362 (2003), pp. 523-526.
  3. Anderson DR, Kovacs MJ, Kovacs G, Stiell I, Mitchell M, Khoury V, et al. Combined use of clinical assessment and D-dimer to improve the management of patients presenting to the emergency department with suspected deep-vein thrombosis (the EDITED Study). J Thromb Haemost 2003;1:645-651.
  4. Lensing AWA, Hirsh J, Büller HR. Diagnosis of venous thrombosis. In: Colman RW, Hirsh J, Marder VJ, Salzman EW. eds. Hemostasis and thrombosis: basic principles and clinical practice. 3rd ed. Philadelphia: J.B. Lippincott, 1994:1297-321.

 

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