AUTORES
- Elena Villarroya Bielsa. Graduada en Fisioterapia en la Universidad de Zaragoza. Fisioterapeuta en el Servicio Aragonés de Salud, Zaragoza.
- Ana Rosa Iglesias Triviño. Diplomada en Fisioterapia en la Universidad de Granada. Fisioterapeuta en el Servicio Aragonés de Salud, Huesca.
- Rita Elena Soria Ayuda. Graduada en Fisioterapia en la Universidad de Zaragoza. Fisioterapeuta en el Servicio Aragonés de Salud, Huesca.
- Andrea Blas Martínez. Graduada en Fisioterapia en la Universidad de Zaragoza. Fisioterapeuta en el Servicio Aragonés de Salud, Zaragoza.
- Adrián Jaime Sánchez. Fisioterapeuta en el Hospital de Barbastro. Salud. Huesca.
RESUMEN
El sistema digestivo es el conjunto de órganos (boca, faringe, esófago, estómago, intestino delgado e intestino grueso) encargados del proceso de la digestión. Los órganos fundamentales para la digestión pueden clasificarse en el sistema gastrointestinal superior (compuesto por boca, faringe, esófago y estómago), sistema gastrointestinal inferior (intestino delgado e intestino grueso) y las glándulas anexas. Dentro de las principales patologías que pueden versar sobre este sistema se encuentran; los problemas de masticación donde el principal abordaje desde fisioterapia será el tratamiento de la articulación temporomandibular y los tejidos blandos colindantes; los trastornos de la deglución que pueden clasificarse en disfagia orofaríngea y esofágica, para la cual será necesaria un reentrenamiento de la deglución y técnicas activas que faciliten este proceso; las alteraciones de la cavidad abdominal donde se trabajará desde el área de fisioterapia técnicas de relajación y respiración; la incontinencia fecal, que se define como pérdida involuntaria de heces sólidas y líquidas y su tratamiento estará basado en el entrenamiento de la musculatura pélvica; y finalmente, el estreñimiento provocado esencialmente por una alteración en la motilidad del intestino, cuyo tratamiento se orientará a la educación del paciente y la realización de ejercicio físico.
PALABRAS CLAVE
Enfermedades del sistema digestivo, fisioterapia, estreñimiento, trastornos de deglución, incontinencia fecal.
ABSTRACT
The digestive system is the set of organs (mouth, pharynx, oesophagus, stomach, small intestine and large intestine) responsible for the process of digestion. The fundamental organs for digestion can be classified into the upper gastrointestinal system (consisting of the mouth, pharynx, oesophagus and stomach), the lower gastrointestinal system (small intestine and large intestine) and the adnexal glands. Among the main pathologies that can affect this system are: chewing problems where the main approach from physiotherapy will be the treatment of the temporomandibular joint and the adjacent soft tissues; swallowing disorders that can be classified into oropharyngeal and esophageal dysphagia, for which it will be necessary to retrain swallowing and active techniques that facilitate this process; alterations of the abdominal cavity, where the physiotherapy area will work on relaxation and breathing techniques; faecal incontinence, which is defined as involuntary loss of solid and liquid faeces and its treatment will be based on training the pelvic musculature; and finally, constipation, essentially caused by an alteration in the motility of the intestine, whose treatment will be oriented towards patient education and the performance of physical exercise.
KEY WORDS
Digestive system diseases, physical therapy specialty, constipation, deglutition disorders,fecal incontinence.
DESARROLLO DEL TEMA
El sistema digestivo es el conjunto de órganos (boca, faringe, esófago, estómago, intestino delgado e intestino grueso) encargados del proceso de la digestión. Así mismo, la digestión se define como el proceso de transformación de los alimentos cuyo fin es que puedan ser absorbidos y utilizados en el metabolismo celular 1.
Los órganos fundamentales para la digestión pueden clasificarse en el sistema gastrointestinal superior (compuesto por boca, faringe, esófago y estómago), sistema gastrointestinal inferior (intestino delgado e intestino grueso) y las glándulas anexas. A continuación se detallan las principales funciones de cada uno de los órganos que componen dicho aparato:
SISTEMA GASTROINTESTINAL SUPERIOR:
BOCA: Es una cavidad hueca en la cual se encuentran los dientes, cuya finalidad es triturar el alimento. La lengua es otro componente de dicha cavidad, se trata de un músculo con gran cantidad de papilas gustativas, que ayuda en la masticación y mezcla de los alimentos, facilitando su tránsito hacia el esófago.
Además, también participan las glándulas salivales, productoras de un líquido llamado saliva, que actúa como lubricante, destruye las bacterias ingeridas con los alimentos e inicia la digestión química de los glúcidos, gracias a la acción de la enzima llamada amilasa o ptialina, que rompe el almidón en maltosa. El resultado de la masticación es una masa homogénea de alimento llamada bolo, cuyos componentes ya han comenzado el proceso de fermentación 1-2.
FARINGE: Es un músculo en forma de tubo situado a nivel cervical, revestido de membrana mucosa; conecta la nariz y la boca con la tráquea y el esófago respectivamente, y por ella pasan tanto el aire como los alimentos, por lo que forma parte del aparato digestivo así como del respiratorio 2.
ESÓFAGO: Se trata de un tubo muscular de unos 30 centímetros, que comunica la faringe con el estómago. A través de este conducto los alimentos son transportados hasta el estómago para continuar su proceso digestivo 2.
ESTÓMAGO: Podría describirse como un reservorio temporal del bolo alimenticio deglutido hasta que se procede a su tránsito intestinal, una vez bien mezclado en el estómago. Se ubica en la porción superior de la cavidad abdominal, debajo del hígado. Su superficie externa es lisa, mientras que la interna presenta numerosos pliegues que favorecen la mezcla de los alimentos con los jugos digestivos 2.
SISTEMA GASTROINTESTINAL INFERIOR:
INTESTINO DELGADO: Es la parte del tubo digestivo que inicia después del estómago y acaba en el ciego del colon. Se divide en tres porciones: duodeno, yeyuno e íleon.
- Duodeno: Es el primer segmento del intestino, mide unos 25 cm de longitud. Ocupa una posición fija en la cavidad abdominal, sostenido en su lugar por ligamentos que lo aseguran al hígado y al estómago. Se encarga de la digestión de los alimentos y de la absorción de los nutrientes. De hecho, es el lugar principal para la absorción de hierro. Varios de los conductos del páncreas, el hígado y la vesícula biliar, se abren en el duodeno para facilitar sus funciones principales2-3.
Además de digerir los alimentos, es responsable de regular la velocidad del vaciado gástrico, así como de la activación de las señales de hambre. - Yeyuno: Mide aproximadamente entre 1,5 a 2,5 metros de largo. Se sitúa entre el Duodeno y el íleon, su función es realizar la absorción de las sustancias de los alimentos. En este trozo de intestino delgado actúa el jugo intestinal, que degrada al mínimo los hidratos de carbono, las proteínas y los lípidos.
- Íleon: El íleon, que es de aproximadamente de unos 7,5 metros de largo, es más pequeño que el yeyuno y tiene una tonalidad más clara. Su principal función es absorber los nutrientes (vitamina B12) del quimo, o los alimentos digeridos3.
INTESTINO GRUESO: Es la penúltima porción del tubo digestivo, formada por el ciego, el colon, el recto y el canal anal 3.
- Ciego: Es la primera porción del intestino grueso. Denominado así por constituir una especie de fondo de saco donde se implanta el apéndice cecal, y en el cual desemboca el intestino delgado a través del esfínter ileocecal. Realiza diferentes funciones y aportes al proceso de digestión, ya que este posee numerosas bacterias que contribuyen a la reducción de algunas sustancias de difícil absorción por otras estructuras.
- Colon: Es la parte más grande del intestino grueso y se divide en tres secciones: colon ascendente, colon transverso y colon descendente.
El colon ascendente, llega hasta el borde del hígado (glándula que produce y secreta la bilis), en este punto se incurva, formando el colon transverso, que se extiende horizontalmente hasta las inmediaciones del bazo (órgano linfático muscular). A partir de aquí se incurva nuevamente hacia abajo, y se denomina colon descendente. Después describe una curva en forma de s, recibiendo el nombre de colon sigmoide o sigma. La principal función del colon es convertir en heces el líquido del intestino delgado, llamado quimo. Junto con esto, interviene en las siguientes acciones:- Las bacterias que habitan en él producen vitaminas K y B.
- Crea anticuerpos que protegen el sistema contra posibles enfermedades.
- Recto: Es el tramo final del intestino grueso. Recoge los residuos cuando se ha eliminado la mayor parte del agua que contienen y los retiene hasta que son expulsados.
- Canal anal: De unos 4cm de longitud, revestido de crestas verticales llamadas columnas anales. En las paredes del canal anal hay dos fuertes capas planas de músculos llamados esfínteres interno y externo, que actúan como válvulas y que se relajan durante la defecación 3.
SALIVALES: Segregan saliva, la que sirve para humedecer los alimentos dentro de la boca y así facilitar la digestión.
JUGOS GÁSTRICOS: El jugo gástrico es un fluido ácido producido en el estómago, cuya presencia es absolutamente necesaria para que pueda iniciarse la digestión de los alimentos que ingerimos. La acidez del jugo gástrico se debe al ácido clorhídrico secretado por las células parietales del estómago y resulta imprescindible para la activación del pepsinógeno, que se transforma en pepsina e inicia la degradación de las proteínas y, por tanto, la digestión.
HÍGADO: El hígado es la glándula más grande del cuerpo y tiene varias funciones importantes, elaboración de la bilis (necesaria para la digestión y absorción de las grasas), función desintoxicante, almacén de vitaminas, etc. Además, es el responsable de eliminar de la sangre las sustancias tóxicas. Tiene otro órgano añadido, la vesícula biliar, que es donde se produce la bilis, la cual es vertida al tubo digestivo en el duodeno.
PÁNCREAS: El páncreas es una glándula con forma de lóbulo grande que tiene la función de secretar la hormona insulina y un fluido alcalino que ayuda al proceso de digestión. La insulina es una importante hormona que ayuda a la regulación de la homeostasis y el metabolismo glucídico en sangre 4.
ALTERACIONES DIGESTIVAS:
PROBLEMAS DE MASTICACIÓN:
Una de las causas más frecuentes de problemas en la masticación es una afectación de la articulación temporo-mandibular.
La causa primaria de los problemas de masticación es la tensión excesiva del grupo de los músculos que controla la masticación, la deglución y el habla. Esta tensión podría ser el resultado del bruxismo (apretamiento persistente o rechinar de los dientes sobre todo nocturno), o de tensiones físicas o mentales.
Otros factores que pueden ser la causa o la agravación de los síntomas son, las fracturas, cirugías bucales, mala oclusión, fallos en la mecánica de la mandíbula, alteración de la postura, inflamación, etc.
Los signos y síntomas más frecuentes son: dolor de la articulación temporomandibular (a menudo prevalece más por la mañana o a últimas horas de la tarde), dolores irradiados de cabeza, detrás de los ojos, en el rostro, los hombros, el cuello y, o la espalda y dolores de oído, crujido o chasquido de la mandíbula, rigidez de la mandíbula y bruxismo 5.
Este tipo de patologías suele ir asociado a tratamiento médico o farmacológico que puede incluir la toma de antiinflamatorios en fase aguda, relajantes musculares, infiltración local para el bloqueo del nervio temporomandibular, el uso de placas de oclusión es una de las medidas terapéuticas más importantes, intervenciones quirúrgicas para trastornos propios de la articulación u otros tratamientos que no mejoran con el abordaje conservador 5.
Desde el campo de la fisioterapia se busca disminuir los niveles de estrés y ansiedad mediante técnicas de relajación y respiración, identificar y abordar hábitos funcionales inadecuados. Aplicación de electroterapia en fase aguda para disminuir el dolor (ultrasonidos: pulsátil y cabezal pequeño. Dosis: de 0,3 a 0,5 W/cm2. Tiempo: 6-8 minutos; TENS: frecuencia: 120 Hz. Impulso: 80 µseg. Tiempo: 15 minutos. Dosis: según tolerancia). Terapia manual para desbloqueos manuales y movilización activa y pasiva. Ejercicios de potenciación y estiramientos musculares. Masoterapia de toda la musculatura periarticular accesible y técnicas de intracavitarias en la zona bucal 6 .
TRASTORNOS DE LA DEGLUCIÓN:
La deglución, es una de las funciones más básicas del organismo, cuyo fin es transportar los alimentos desde la boca al estómago. Depende de dos factores relacionados entre sí: la estructura y la función. La dificultad para lograr un proceso de deglución normal se denomina disfagia
Por tanto se define disfagia, como la dificultad para tragar o deglutir los elementos líquidos y/o sólidos por la afectación de una o más fases de la deglución. La afectación puede presentarse en la preparación oral del bolo alimenticio o en el desplazamiento7.
Se puede clasificar según la causa o según la localización:
- Según causa
Disfagia orofaríngea estructural: las alteraciones estructurales, como son los tumores en cabeza o cuello, los osteofitos cervicales y las estenosis esofágicas por anillos posquirúrgicos o post-radioterapia. Existe dificultad para la progresión del bolo alimenticio debido a la obstrucción.
Disfagia orofaríngea funcional: es debida a un trastorno funcional de la motilidad orofaríngea que afecta a la propulsión del bolo y a la reconfiguración orofaríngea durante la deglución. Tiene relación con enfermedades neurológicas y envejecimiento (alteraciones del reflejo deglutorio y alteraciones en la apertura del esfínter esofágico superior) 7.
2. Según localización
Disfagia orofaríngea: Afectación del mecanismo muscular de la faringe y el esfínter esofágico superior o músculo cricofaríngeo. Suele iniciarse con dificultad para iniciar la deglución y habitualmente identifica la región cervical como el área del problema. Los síntomas más frecuentes son; falta de reconocimiento del alimento, dificultad para iniciar la deglución, segmentación del bolo en la cavidad oral, regurgitación nasal, retraso de reflejo deglutorio, dificultad respiratoria y alteración del reflejo tusígeno.
Disfagia esofágica: afectación a nivel de esófago debido a obstrucción o bien a alteración de la motilidad. La disfagia para sólidos y líquidos implica un problema de motilidad esofágica, reforzado por un curso intermitente acompañado de dolor torácico. La disfagia para sólidos y nunca para líquidos sugiere una obstrucción mecánica. El curso progresivo indicará una estrechez péptica (historia prolongada de pirosis y regurgitación sin pérdida de peso) o un carcinoma (asociado a pérdida de peso)8.
Tratamiento multidisciplinar y fisioterápico 9-10:
- Modificaciones de la dieta son el componente clave en el programa de tratamiento general de pacientes con disfagia
- Modificación del volumen del bolo
- Modificación de la consistencia de los alimentos
2.Cambios posturales
- Flexión anterior del cuello. Desplaza la epiglotis y la base de la lengua hacia la pared posterior.
- Rotación lateral de la cabeza. Favorece el paso del bolo por el lado contralateral a la rotación
- Inclinación lateral. Induce al paso homolateral del bolo.
3. Ejercicios neuromusculares: El objetivo de la reeducación muscular es mejorar las sinergias musculares que intervienen en las diferentes etapas deglutorias, en su coordinación y sincronismo.
4. Maniobras de deglución
- Deglución supraglótica
- Deglución súper-supraglótica
- Maniobra de Mendelsohn
- Deglución forzada
5.Electroterapia
- Estimulación eléctrica transcutánea
- La estimulación magnética transcraneal
- Miofeedback
ALTERACIONES EN CAVIDAD ABDOMINAL:
Las cavidades abdominal y pélvica constituyen una sola unidad, que dentro de ellas se encuentran los sistemas digestivo, urinario y reproductivo, y que por ella pasan importantes vasos sanguíneos, linfáticos y nerviosos, el dolor abdominal puede ser un síntoma de numerosos desórdenes no necesariamente relacionados con el aparato digestivo, por lo que será necesario descartar otras posibles causas4. Los gases generados durante los procesos digestivos pueden quedar atrapados y producir distensión, incomodidad y dolor abdominal4.
El tratamiento fisioterápico para este tipo de patologías se va a centrar en técnicas de relajación, técnicas respiratorias y ejercicio físico moderado. Desde la fisioterapia se conoce de técnicas que permite normalizar patrones alterados de respiración, ayudando a controlar la profundidad y la frecuencia respiratoria, la postura y el empleo de la musculatura adecuada 11.
Los ejercicios respiratorios más utilizados en esta patología son el uso de la respiración abdominal, en decúbito supino con las piernas en semiflexión y las manos sobre el abdomen. Se realizan respiraciones abdominales, hinchando el abdomen durante la inspiración y vaciándose dirigiendo el ombligo hacia el suelo en la espiración 9. Y la respiración abdominal abrazando las piernas, posición decúbito supino con las piernas en flexión, las manos recogen las rodillas. Se realizan respiraciones abdominales, hinchando el abdomen durante la inspiración y vaciándose presionando el abdomen con las rodillas durante la espiración12.
Las técnicas de relajación que pueden utilizarse son:
- La técnica de relajación de Jacobson, consiste en adiestrar al individuo para que controle el estado de tensión muscular de las diferentes partes de su cuerpo mediante la realización de ejercicios de contracción-relajación8.
- El entrenamiento autógeno de Schultz es más complejo, pero en líneas generales estaría relacionado con la representación mental de las consecuencias motoras de las sensaciones de peso y calor, que activaría eferencias somáticas y viscerales 11.
Y finalmente la realización de ejercicio físico de intensidad moderada ayudará a favorecer la activación de la musculatura abdominal así como el peristaltismo y los cambios de posición.
INCONTINENCIA FECAL:
La incontinencia fecal (IF) según la International Consultation on Incontinence podríamos definirse como la pérdida involuntaria de heces sólidas y líquidas, siempre que esta pérdida suponga un problema higiénico o social para la persona que la padece4.
Aunque se trata de una patología frecuente, su prevalencia es variable dependiendo de la definición utilizada y de la población estudiada. Estudios recientes muestran una prevalencia en la comunidad en rangos de 2 a 24%, dependiendo del grupo estudiado. Sin embargo, en pacientes institucionalizados, tanto internacionales como nacionales describen una incidencia entre el 30 y el 45%. La edad es un factor a considerar al momento de evaluar la prevalencia de esta patología llegando desde un 2.6% en personas entre 20 a 29 años hasta un 15% en personas mayores de 70 años. La razón del retraso en la manifestación clínica de esta injuria es aún desconocida, planteándose un probable rol del envejecimiento fisiológico y trastornos hormonales asociados a la menopausia.
Estudios han mostrado resultados conflictivos sobre una mayor prevalencia en mujeres en comparación a los hombres. En el hombre, el daño esfinteriano post cirugía ano rectal, la proctitis por radiación y la presencia de desórdenes sensoriomotores que afectan la sensación rectal, suelen ser las causas más frecuentes de IF. En la mujer la principal causa de IF es el daño esfinteriano de causa obstétrica, el cual suele manifestarse entre la quinta y la séptima década de la vida 13.
La continencia fisiológica depende de varios factores y procesos, que incluyen la función mental, indemnidad anatómica y funcional del aparato esfinteriano, consistencia y volumen de las heces, el tipo y velocidad del tránsito intestinal, la distensibilidad rectal, la función del esfínter anal, la sensación anorectal y los reflejos anorectales.
La IF aparece cuando se alteran los factores anatómicos y/o funcionales que mantienen la fisiología normal de la defecación:
- Esfinter anal: daño obstétrico, cirugía proctológica, dilatación anal, radiación o enfermedad inflamatoria intestinal.
- Recto: prolapso, hipersensibilidad/hiposensibilidad, neoplasia, anormalidades congénitas, descenso perineal excesivo.
- Músculo puborrectal: trauma o daño obstétrico.
- Nervio pudendo: daño quirúrgico, descenso perineal excesivo.
- Sistema nervioso: SNC, médula espinal, ACV, cirugía columna, diabetes, esclerosis múltiple, sífilis, cauda equina o neoplasias.
Se encuentran disponibles diferentes tratamientos eficaces para la incontinencia fecal. El tratamiento varía y depende de la causa de su problema.
- Cambios en la dieta: Prevenir la diarrea y el estreñimiento es muy útil para controlar la incontinencia.
- Medicamentos: Se pueden recetar laxantes o fármacos contra la diarrea o ablandadores de heces para tratar la incontinencia.
- Entrenamiento para evacuar el intestino: Desarrollar un patrón de evacuación del intestino regulares pude ser muy útil. Este procedimiento mide las contracciones del esfínter mientras se realizan unos ejercicios de Kegel. El entrenamiento de biorretroalimentación puede fortalecer los músculos del esfínter y darle más control sobre las evacuaciones del intestino.
- Cirugía: Varios procedimientos quirúrgicos distintos pueden tratar la incontinencia fecal. A menudo estas cirugías reparan o reemplazan los músculos del esfínter.
En el campo de la fisioterapia la incontinencia fecal se aborda de un modo conservador, empleando técnicas de reeducación como el biofeedback, la electroestimulación, el balón rectal y una serie de ejercicios (entre ellos la gimnasia hipopresiva) que ayudarán al paciente a tener un mayor control sobre la continencia anal. Además de estas técnicas es imprescindible seguir unas pautas higiénico-dietéticas para vaciar bien el recto y evitar la producción de gases, así como una corrección de la maniobra defecatoria que puede estar debilitando más el suelo pélvico y favoreciendo la aparición de prolapsos urogenitales13.
ESTREÑIMIENTO:
El estreñimiento es otro problema del tránsito y se trata de un síntoma gastrointestinal común que se presenta entre 2% y 20% de la población general.
El término estreñimiento, más que una enfermedad en sí misma, hace referencia a la apreciación de cada individuo sobre su hábito intestinal. Dado el amplio margen de hábitos intestinales normales, resulta muy difícil definir el estreñimiento con exactitud.
En la práctica se utiliza como criterio más objetivo la frecuencia de la defecación, considerándose estreñido al individuo que realiza menos de tres deposiciones semanales. Sin embargo, este criterio no es suficiente por sí mismo, ya que muchos pacientes con estreñimiento refieren una frecuencia normal pero con otras molestias subjetivas, como un esfuerzo excesivo, heces muy duras o una sensación de evacuación incompleta.
El estreñimiento es un problema cuya prevalencia es mayor en mujeres que en hombres, en niños que en adultos y en pacientes de edad avanzada que en jóvenes 14.
Aunque la mayoría de las veces el estreñimiento es consecuencia de alteraciones funcionales primarias del colon y el ano-recto, también puede estar relacionado con el uso de medicamentos, con lesiones anatómicas, enfermedades metabólicas y neurológicas (estreñimiento secundario).
Si se excluye una causa secundaria, se considera que el estreñimiento es primario o idiopático. Éste debe considerarse esencialmente un trastorno de la motilidad colorrectal y en la actualidad puede clasificarse en tres subgrupos:
- Estreñimiento con tránsito colónico lento (inercia colónica).
- Disfunción del suelo pélvico.
- Estreñimiento con tránsito colónico normal (estreñimiento funcional)14
La causa más frecuente de estreñimiento hoy en día son los factores dietéticos, especialmente la falta de fibra en la dieta. Otras veces, el estreñimiento está relacionado con diferentes enfermedades que padece la persona y es un síntoma frecuente en pacientes con diabetes y enfermedades del tiroides. También pueden producir estreñimiento algunos medicamentos que se utilizan para tratar el dolor, la depresión y algunas enfermedades del corazón.
Entre las causas fisiológicas destacan:
- Hipomotilidad intestinal: Los músculos del intestino no tienen fuerza suficiente como para realizar las contracciones necesarias para expulsar las heces.
- Hipermotilidad intestinal: Aparecen espasmos o contracciones involuntarias en una parte del intestino que retienen las heces, impidiendo una correcta evacuación.
- Problemas rectales: Los músculos del recto no producen el reflejo suficiente para una defecación normal o bien hay lesiones locales que provocan dolor.
- Debilidad de los músculos de la pared abdominal: No hay presión suficiente para evacuar.
- Obstrucción mecánica del colon o del recto: Cuando hay lesiones intrínsecas o extrínsecas del intestino grueso o del ano.
Los síntomas varían dependiendo de cada paciente ya que en cada persona el estreñimiento presenta unas características diferentes. La mayoría de los pacientes con estreñimiento refieren uno o más de los siguientes síntomas: evacuaciones duras, infrecuentes, que se acompañan de esfuerzo excesivo y sensación de evacuación incompleta 14.
El estreñimiento es un problema muy común y que puede ser consecuencia de alteraciones funcionales primarias del colon y el ano-recto o estar relacionado con el uso de medicamentos y otras condiciones patológicas.
Desde el punto de vista de la fisioterapia podemos tratar el estreñimiento recomendando al paciente que evite el sedentarismo mediante ejercicio físico, el cual juega un papel muy importante en el aumento de los movimientos peristálticos, facilitando el tránsito intestinal, ayudados por el movimiento muscular. Un hábito muy saludable es caminar de 30 a 60 minutos al día con un buen ritmo. Asimismo es aconsejable realizar frecuentemente ejercicio de una forma global y dinámica, con especial atención a los ejercicios abdominales y respiratorios, excepto que sientan molestias o dolor al realizarlos, en cuyo caso se deben suspender. También, podemos recomendar ejercicios centrados en el trabajo abdominal y que contribuyen al alivio del estreñimiento si se realizan todos los días o al menos 3 veces a la semana.
También se le puede recomendar que lleve una hidratación adecuada, es aconsejable beber agua con más frecuencia, fuera de las comidas y repartida a lo largo del día, ya que son dos factores que pueden agravar la situación.
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